Canelones de carne, vino tinto y siesta

Podemos usar una masa de pasta o de crepes (panqueques), pero acá el chiste va a ser el relleno. Es un plato ideal para atravesar estos días de frío.

14 de Agosto de 2015 16:31

Hoy hacemos canelones de carne, un plato con bastante calorías, ideal para estos días de frío. Se puede combinar a la perfección con un buen vino tinto. Eso si, tené a mano un sillón o una cama para hacerte una siestita.

Podemos usar una masa de pasta o de crepes (panqueques), pero acá el chiste va a ser el relleno. Por las dudas, paso la receta de los crepes: 2 huevos, una cucharadita de sal, 500 gramos de harina y 50 de leche. Se bate todo, se deja descansar y luego se hacen los panqueques en un sartén antiadherente.

Relleno: vamos a usar 1 kilo de carne de ternera (roast beef, nalga, aguja) o podemos reemplazar una parte por carne de cerdo. Cortamos dados grandes y reservamos.

En una olla de fondo grueso arrancamos sudando dos cebollas picaditas con unos dientes de ajo y cuando se transparentan le agregamos un morrón verde y dos zanahorias (todo picado bien chiquito). Cocinamos a fuego bajo por unos minutos, subimos el fuego y agregamos los dados de carne. Cocinamos hasta que todo tome temperatura y agregamos 300 centímetros cúbicos de vino tinto. Siempre que agregamos alcohol tenemos que dejar evaporar un poco antes de agregar otro líquido, que en este caso va a ser 500 centímetros cúbicos de caldo de carne (pude ser de verdura si no hay).

Llevamos todo esto a hervor en olla tapada hasta que la carne se desarme (2 horas). Al final condimentamos con sal, pimienta y comino si nos gusta. Cuando tenemos el relleno listo lo dejamos enfriar y desarmamos la carne con los dedos, con esto vamos a rellenar nuestras masas. 

Encima de esto vamos a hacer una salsa simple de queso. Llevamos a un sartén 70 gramos de manteca, derretimos y agregamos 70 gramos de harina, mezclamos y cocinamos unos minutos sin que se dore.

Por otro lado, ponemos a calentar 1 litro de leche y antes de que hierva le agregamos la mezcla de manteca y harina con batidor de alambre para que no se hagan grumos. Dejamos que llegue nuevamente a hervor y apagamos. Al final le incorporamos 300 gramos del queso que más nos guste (sardo, roquefort, gruyere).