La noche que Muhammad Ali peleó con el marplatense Miguel Ángel Páez

Fue en noviembre de 1971, en una exhibición en la primera de sus dos visitas al país. Páez, triple campeón argentino, que también peleó con Foreman y fue recibido por Perón, fue recordado por uno de sus hijos en esta nota de 0223.

Muhammad Alí, Miguel Ángel Páez y su entrenador, Héctor Dipilato, en la exhibición que el excampeón mundial brindó en Buenos Aires, en 1971.

7 de Junio de 2016 17:14

Desde el sábado a la madrugada, cuando se conoció la muerte del legendario Muhammad Ali, se sucedieron todo tipo de notas que recordaron su trayectoria como boxeador. Fotos, testimonios, videos de sus peleas inolvidables. Y Mar del Plata puede enlazarse con su historia en una pequeña pero inolvidable parte, al decir que tuvo a un pupilo de su ciudad que se enfrentó con "el más grande". Se trata del ya fallecido Miguel Ángel Páez, dos veces campeón argentino de los mediopesados y una de los pesados, que el 5 de noviembre de 1971 se midió con el estadounidense en una exhibición llevada a cabo en el estadio del club Atlanta, en Buenos Aires.

Cassius Clay arribó entonces para la primera de sus dos visitas a Argentina, traído por un empresario y auspiciado por la Unión Obrera Metalúrgica y Canal 9. Estuvo apenas 42 horas en el país. El año anterior, había vuelto a boxear, luego de la suspensión que Estados Unidos le había impuesto en 1967 por su histórica negativa a sumarse a las Fuerzas Armadas de su país en plena Guerra de Vietnam. En diciembre del `70 derrotó a Ringo Bonavena en el Madison Square Garden, y en marzo cayó ante Joe Frazier, con Frank Sinatra y Woody Allen entre el público.

El país estaba bajo el mando del gobierno de facto del general Alejandro Lannuse, envuelto en una crisis socioeconómica. En ese marco, se dio esta exhibición de Muhammad Alí con el marplatense Miguel Ángel Páez, en un estadio del barrio de Villa Crespo con poco público y que tuvo incidentes dentro del campo de juego, con gente incluso subiéndose al cuadrilátero.

En 1970, tanto Miguel Ángel Páez como Muhammad Alí enfrentaron y vencieron a Ringo Bonavena. El 10 de enero, el marplatense le ganó por descalificación en el 7º round, en el Luna Park. Y el 7 de diciembre, Cassius Clay transpiró hasta derrotarlo en el 15º asalto, en el Madison Square Garden de Nueva York". 

Ha sido tal vez el momento más importante de la gran trayectoria del poco reconocido pugilista marplatense. Aunque no fue un combate, Páez -que en 1972 enfrentó nada menos que a George Foreman en California, con derrota tras dos rounds- conoció y enfrentó en cinco asaltos al prolífico estadounidense, que lo elogiò y se lamentó por haberlo conocido tarde. Su hijo Miguel recordó ese momento en diálogo con 0223: "Yo tenía 7 años en ese momento. Pero siempre nos ha contado sobre esa noche inolvidable. Alí, además de boxeador era un showman. En un round le hizo a mi viejo una `bicicleta` (una especie de paso en falso). Papá lo miró y le respondió con una acción similar. Muhammad miraba al público como diciendo `miralo a este`", contó. "En otro round, Alí hizo como que mi viejo lo tira a la lona, pero de forma sarcástica", agregó.

Pero Páez, además de una foto que ilustra esta nota, se quedó para siempre con un gran elogio del estadounidense: "Cuando bajó del ring preguntó `¿quien es este tipo?`. Mi papá era muy habilidoso para pelear. Y cuando le dijeron, preguntó cuántos años tenía. Mi viejo tenía 31 en ese momento. Alí dijo `qué lástima, si hubiese sabido antes me lo llevaba conmigo, ahora es grande`", recordó Miguel ante 0223.

Miguel Ángel Páez había nacido el 25 de abril de 1940 en Mar del Plata, precisamente en el exbarrio del Matadero. Y su trayectoria cuenta que el 14 de agosto de 1965 venció a José Menno en el desaparecido estadio Bristol de avenida Luro, consagrándose campeón argentino del peso medio pesado. "Fue el primer deportista marplatense famoso, con trascendencia, antes que Guillermo Vilas", cuenta orgulloso Miguel. 

El 6 de septiembre tuvo su revancha con el recordado Andrés "El Cacique de Bragado" Selpa, volviendo a lograr el mismo título. Y en abril del `71 venció a Eduardo Corletti, otro de los grandes boxeadores de la época, en Temperley para consagrarse por primera vez campeón de los pesados. Con ese cinturón fue que el pupilo de Héctor "Nene" Dipilato llegó a la exhibición ante Muhammad Alí.

En 1968 y durante cuatro meses consecutivos, la revista Boxing Illustrated, de Nueva York (segunda en importancia del momento), tuvo entre los diez mejores pesos pesados del mundo a cuatro argentinos: Oscar Bonavena, Eduardo Corletti, Goyo Peralta y el marplatense Miguel Páez.

La carrera de Páez continuó en el exilio. Es que tras vencer a Corletti le dedicó el triunfo por TV "a un amigo con el que estuve en España, a Juan Domingo Perón". El nombre del expresidente de los argentinos estaba proscripto por la dictadura. "A Tito Lectoure no le gustó eso y no le dio más peleas. Mi viejo decía `tengo mas titulos que un conde pero no tengo un kilo de pan`. Y nos fuimos a vivir a Italia". Miguel Ángel había estado con el "General" en Puerta de Hierro, su residencia en Madrid, aprovechando un desperfecto del avión que debió aterrizar en el aeropuerto de Barajas. El marplatense venía de pelear en Londres con Joe Bugner. Perón luego le envió una medalla desde España.

Páez, con tapado de piel, saludando a Juan Domingo Perón en España.

Su último combate fue el 14 de marzo de 1980 en derrota ante Juan Carlos Sosa por el título argentino de los pesados livianos. Y falleció en 1998, tras sufrir un cáncer de próstata. "Era una persona muy carismática, caminaba por la calle y la gente lo saludaba, las cuentas de los restaurantes estaban pagas. Hay que entender que fue el primer deportista marplatense famoso. Le gustaba contar anécdotas. Y ese encuentro con Muhammad Alí fue el súmmum de su carrera". Páez dejó huella en el boxeo argentino. Y su anecdotario da para una nota más extensa y nueva. Sin embargo, ante el fallecimiento del legendario estadounidense, imposible no recordarlo con ese encuentro que lo marcó para siempre, y que pocos marplatenses seguro conocían.

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