Discutió por drogas y lo mató de quince puñaladas: ocho años de prisión

El hecho ocurrió en diciembre de 2015. La condena se decidió tras un juicio abreviado. Hernán Bertone seguirá internado en una comunidad terapeútica.

El hecho ocurrió en diciembre de 2015. (Foto: archivo 0223).

20 de Octubre de 2017 19:48

Por Redacción 0223

PARA 0223

El joven de 22 años que mató de quince puñaladas a un amigo tras una discusión por una deuda relacionada con la venta de estupefacientes fue condenado a ocho años de prisión tras la realización de un juicio abreviado. Hernán Bertone fue hallado autor penalmente responsable del delito de homicidio simple y seguirá internado en la comunidad terapeútica en el proyecto Vida Digna.

El juez Alfredo Deleonardis avaló el acuerdo que alcanzaron el fiscal Fernando Castro y la defensa al dar por probado que el 27 de diciembre de 2015 el imputado ingresó al domicilio de Maximiliano José Ramón Ramallo ubicado en la planta baja de Gascón 1554. Tras una discusión a gritos –que escucharon varios vecinos- le efectuó al menos quince puñaladas en la cabeza, cuello, espalda, y muslo, de las cuales dos propinadas sobre el cuello causaron su muerte por shock hipovolémico.

La participación de Bertone estuvo probada a partir de las declaraciones de los testigos que lo vieron salir corriendo del inmueble y de quienes lo reconocieron en las imágenes de las cámaras de seguridad de la zona. Al momento de ser detenido cuatro días más tarde en el departamento de sus padres ubicado sobre la calle Las Heras, el imputado presentaba lesiones en uno de sus dedos, provocadas por elemento cortante y escoriaciones en un antebrazo que impresionaron como producidas por uñas humanas.

Tal como informó oportunamente 0223, en su domicilio secuestraron las sandalias que llevaba puestas el día del hecho y prendas de vestir que, a pesar de haber sido lavadas, presentaban manchas hemáticas. La campera con la que se lo vio salir del edificio era de la víctima al igual que una bolsa que habría tenido marihuana y era propiedad de Ramallo.

Si quedaba alguna duda acerca de la responsabilidad de Bertone en el hecho, el resultado del análisis de cotejo por ADN las despejó por completo. Los análisis de las manchas hemáticas tomadas en el pasillo, la puerta del placard, la heladera y el dormitorio que corresponderían a heridas que le habría provocado la víctima a su agresor mientras intentaba defenderse arrojaron en once casos "un perfil genético masculino único y completo que coincide en su totalidad con el perfil genético” del imputado.

El magistrado descartó cuestiones eximentes de la responsabilidad penal y consideró como atenuantes la falta de antecedentes penales, el buen concepto vecinal y la alegada tendencia al consumo de estupefacientes desde temprana edad. En base a los informes de los peritos que entrevistaron a Bertone, sostuvo que sus características “pudieron haberle dificultado la valoración del alcance del acto ilícito y la elección de la conducta debida, lo que amerita una menor reprochabilidad, al estrechar el marco de su conciencia y restringir -de tal modo- su libre albedrío”.

Tras calificar al hecho como homicidio simple, el juez condenó a Hernán David Bertone en carácter de autor y le impuso una pena de ocho años de prisión. El joven seguirá por el momento internado terapéuticamente en el Proyecto Vida Digna.