Piden perpetua para dos exmilitares acusados del homicidio de Ana Lía Magliaro

El Ministerio Público Fiscal, integrado por Juan Manuel Portela y María Eugenia Montero, pidió este martes la pena de prisión perpetua para los exmilitares Alfredo Manuel Arrillaga y Leandro Edgar Marquiegui por el homicidio, agravado por alevosía y por el concurso premeditado de dos o más personas de Ana Lía Delfina Magliaro. Los acusados formaron parte de la plana mayor de la Subzona 15, que tenía su sede en la Agrupación de Artillería de Defensa Aérea (AADA) 601. Las defensas oficiales, por su parte, solicitaron que los imputados sean absueltos, informa el sitio Fiscales.gob.ar.

Ana Lía Magliaro fue secuestrada en La Plata el 19 de mayo de 1976 y estuvo detenida junto a Alicia Carriquiriborde de Rubio y Graciela De La Torre en el centro clandestino de detención conocido como El Vesubio. Allí permanecieron secuestradas durante dos meses en condiciones infrahumanas y fueron sometidas a reiteradas sesiones de tortura. Luego fueron llevadas a distintas comisarías de la Capital Federal. Si bien sus compañeras de cautiverio fueron quedaron alojadas en la cárcel de Devoto a disposición del Poder Ejecutivo Nacional, Magliaro fue enviada a Mar del Plata.

Los datos señalan que el 4 de agosto un capitán del Ejército buscó a Magliaro en la comisaría 34 para llevarla hasta Mar del Plata en avión. Después fue entregada y puesta a disposición de la Agrupación de Artillería de Defensa Aérea 601. Un mes más tarde su cuerpo fue encontrado acribillado en la vía pública, en la zona del barrio Constitución.

El cadáver de Magliaro tenía varios impactos de bala y en su boca llevaba marcas de tela adhesiva con la que habría sido amordazada. Su cuerpo también presentaba hematomas en las muñecas, el pecho y la vagina, además de cicatrices producto de la picana eléctrica.

En ese entonces, Marquiegui se desempeñaba como jefe de Inteligencia, mientras que Arrillaga era el jefe de Operaciones de la Agrupación de Artillería de Defensa Aérea 601 de Mar del Plata.

Los informes de la exDirección de Inteligencia de la Policía de la Provincia de Buenos Aires (ex Dipba) y las notas periodísticas de la época dan cuenta de las tareas de seguimiento realizadas sobre Magliaro y, para el MPF, confirman que las fuerzas represivas consideraban que ella había participado en el atentado que le costó la vida al coronel Rafael Raúl Reyes, entonces jefe de la Subzona 15. Su muerte había traído hasta la ciudad al Comandante del I Cuerpo del Ejército, el general Carlos Guillermo Suarez Mason. Incluso, el propio Jorge Rafael Videla acudió al sepelio en el Cementerio de la Chacarita.

“Esto explica el despliegue del operativo para trasladar en la forma en que se hizo a Magliaro hasta Mar del Plata”, apuntó Portela al momento de los alegatos.

Por su parte, el defensor oficial Manuel Bailleau pidió las absoluciones de sus defendidos. Acompañado por su colega José Galán, quien planteó la prescripción del homicidio, pidió la nulidad de las audiencias de debate por la incapacidad sobreviniente de Marquiegui, un tema que fue resuelto en un incidente previo al comienzo del juicio. Además, sostuvo que la hipótesis del Ministerio Público Fiscal no había sido probada con grado de certeza suficiente para llegar a una sentencia.

El tribunal estará integrado por los jueces Néstor Parra, Bernardo Bibel y María Morgese Martín. En este caso no actúa el Tribunal Oral Federal de Mar del Plata en su composición original porque sus jueces intervinieron en el juicio a Rezett y allí resolvieron investigar a sus superiores, que ahora son juzgados.