Testimonio de arrepentido permitió avanzar en causa por venta de drogas “vip”

Cinco personas siguen detenidas con arresto domiciliario y el líder de la banda continúa prófugo. Imputaron a un policía como coautor y al encargado de una cervecería.

La Policía Federal allanó tres viviendas y las oficinas de una cervecería.

8 de Septiembre de 2017 19:47

Por Redacción 0223

PARA 0223

En febrero de este año cinco personas acusadas de comercializar cocaína bajo la modalidad delivery a clientes de alto poder adquisitivo fue desarticulada, aunque el jefe logró escapar y permanece prófugo. La  investigación a cargo de los fiscales Daniela Ledesma y Leandro Favaro incorporó la declaración de un arrepentido que permitió ampliar el objeto de imputación a dos  personas y realizar varios allanamientos en los que se secuestraron elementos de interés para la causa.

Según la información a la que tuvo acceso 0223, la declaración del arrepentido –avalada por una decisión de la Cámara de Apelaciones y Garantías- permitió confirmar la hipótesis fiscal acerca de la modalidad de la banda: la venta de droga –especialmente cocaína- se coordinaba a través de comunicaciones telefónicas o por WhatsApp con clientes de alto poder adquisitivo.

Más allá del fraccionamiento que podía hacerse bajo la modalidad delivery, las operaciones apuntaban a envoltorios cuyo monto nunca era menor a los quinientos pesos, la mitad del mínimo requerido para los clientes “vip”.

El análisis de la documentación incluyó los datos que aportaron los  cruces de llamadas de los celulares de los imputados y permitió ampliar el objeto de imputación a dos personas: un oficial –identificado como Ariel Ortiz- que trabajó hace unos meses en la División de Investigación del Tráfico de Drogas Ilícitas y el encargado de una cervecería.

“El oficial de policía está acusado de colaborar activamente con el prófugo Gustavo Arce, posibilitando la comercialización de estupefacientes, brindándole protección y reduciendo de manera notable el riesgo de su actividad ilícita”, le aseguró a este medio una fuente cercana a la causa.

Esos elementos, más la novedosa declaración del “arrepentido” le permitieron a los fiscales imputarlo como coautor de comercio agravado de estupefacientes por participación de tres o más personas en forma organizada; por servirse de un menor de 18 años; y por ser cometido por funcionario público encargado de la prevención o persecución de ese delito.

En el marco de la misma investigación también imputaron al encargado de una cervecería que facilitó el lugar para las reuniones entre Arce y el oficial de policía cuya defensa solicitó la eximición de prisión. “Como su participación estuvo específicamente vinculada a evitar huellas o rastros en el campo de las comunicaciones- se lo consideró cómplice secundario del mismo delito”, indicaron las mismas fuentes.

Con el aval de la Justicia de Garantías, este viernes personal de la División Antidrogas de la Policía Federal allanó tres viviendas ubicadas en Bronzini al 400, Avellaneda al. 2200, Nueve de Julio al 3900 y unas oficinas en Mitre al 3100 en los que se secuestraron elementos de interés para la causa como agendas, celulares y computadoras.

Mientras los cinco detenidos cumplen su prisión preventiva bajo la modalidad de arresto domiciliario y Gustavo Arce lleva más de doscientos días prófugo, la continuidad de la investigación confirmó el modo de operar de la banda que vendía estupefacientes a un público “vip”.