"Para compostar sólo hace falta cambiar la cabeza"

Así lo afirmaron desde el Grupo Cooperativo Verde Orgánico. El compostado es una forma natural de reducir la cantidad de residuos sólidos urbanos que generamos. Además se produce abono orgánico rico en nutrientes.

7 de Noviembre de 2018 11:07

La disposición final de los residuos sólidos urbanos es una problemática a nivel mundial. En Mar del Plata se declaró la emergencia ambiental en el predio y su colapso es una preocupación permanente. Según los datos del Segundo Informe de Monitoreo Ciudadano Mar del Plata entre Todos, “en 2016 se dispusieron en promedio 1,9 kilos de residuos diarios por habitante del partido de General Pueyrredon (incluido todo tipo de residuos: escombros, residuos industriales, etc.) y a nivel domiciliario, se dispusieron 0,67 kg por habitante y por día, en promedio.”.

Para reducir la cantidad de residuos que generamos, cada vez más personas deciden compostar en sus casas. “El compostado es una forma natural de reciclaje que consiste en la transformación de la materia orgánica en abono natural a través de un proceso controlado de descomposición”, explicó Mariela Piñero, del Grupo Cooperativo Verde Orgánico. Este proceso, que imita lo que ocurre de forma espontánea en la naturaleza, “se da de manera aeróbica, es decir en presencia de aire, y además necesita de humedad y calor para que se desarrolle”.

Los beneficios del compostado son inmediatos: más allá de reducir la cantidad de residuos que se disponen en el predio (entre el 40-60% del peso total de la bolsa de basura domiciliaria es material orgánico), también “se elimina el mal olor ya que no tenés lixiviados en las cocinas”. Además, al evitar los orgánicos en el tacho de basura, quedan allí sólo materiales secos lo cual facilita el proceso de reciclaje que se puede realizar en el predio.

Desde Verde Orgánico apuestan a “descentralizar el proceso de la basura, ya que de este modo no habría problemas tan complejos”. Para ello realizan talleres que buscan compartir el conocimiento y lograr que los residuos domiciliarios se puedan trabajar en cada casa.

En este sentido Piñero aclaró que “no hay condición que limite el proceso de compostaje; lo que hace falta es cambiar la cabeza.” En esta línea, desde Verde Orgánico proponen algunas herramientas para tener un buen compostaje:

  • Definir un lugar en el exterior y a la sombra donde depositar los residuos. Debe tener buena ventilación y pequeñas puertas en la parte inferior por donde extraer fácilmente el compost cuando está listo. Preferentemente debe estar en contacto directo con la tierra, si está sobre asfalto o cemento, se le debe hacer un fondo agujereado por donde escurran los lixiviados y poner una bandeja o recipiente contenedor de líquidos por debajo.
  • Los materiales a compostar en lo posible deben estar picados, ya que así se reduce el tiempo que tarda en descomponerse. Asimismo hay que poner 1 parte de Carbono (materia orgánica de color marrón: ramas, hojas secas, pasto seco) cada 40 de Nitrógeno (materia orgánica de color verde: restos de fruta y verdura, pasto, hojas verde). No se debe colocar nada cocido ni derivado de animales.
  • Cada vez que la pila sube 5-10 cm. Es importante poner un poco de tierra para incorporar microorganismos (hongos, bacterias y actinomicetos) quienes realizan la descomposición.
  • Es necesario humedecer el material ya que requiere entre 40 y 60% de humedad.
  • El proceso de descomposición requiere de temperatura para que los microorganismos estén más activos. Suele tardar entre 3 y 6 meses según la época del año. Cuanto más calor, menos tarda en madurar.

Como sostienen desde Verde Orgánico: "Multiplicar el hábito de compostaje hogareño y domiciliario está en nuestras manos. Podemos multiplicadores de acciones para la preservación del medioambiente".