El origen del arma y al análisis de celulares: los pasos pendientes para cerrar la causa del crimen del dueño de Manolo

Luego de que el informe preliminar de autopsia confirmara que Miguel García disparó tres veces antes de que Juan Santurian cayera al piso y lo rematara de otros disparos para posteriormente quitarse la vida, el fiscal Alejandro Pelegrinelli autorizó la entrega de los cuerpos a sus familiares y allegados y solicitó las últimas medidas para cerrar definitivamente la investigación.

La intención del fiscal es recibir los informes completos –tanto de autopsia como de balística- y establecer efectivamente si el arma Tanfoglio calibre .40 con la que asesinó a su ex yerno estaba efectivamente a nombre de García. “Aunque no se estima que haya elementos que modifiquen la dinámica del hecho también solicitó el análisis de los celulares de víctima y victimario que secuestraron en el lugar”, señalaron las fuentes consultadas por 0223.

El análisis final de las imágenes de las cámaras de seguridad del edificio Boghoss II ratificó que toda la secuencia duró menos de un minuto. Más allá de que la ubicación de las mismas dejan varios puntos ciegos y no permite por los ángulos ver los cuerpos completos, se estableció que el hombre de 70 años acomete a Santurian y sin discusión alguna disparó en tres oportunidades y lo hizo caer al piso.

“El ángulo de la cámara hace que se vea solamente las piernas de García que se acerca al dueño de Manolo tirado en el piso y lo remata de otros dos disparos antes de alejarse y suicidarse detrás de una columna”, agregaron.

En virtud de que la hermana de Santurian estaba en Uruguay y sus hijas en Estados Unidos, los trámites para retirar el cuerpo y las pertenencias del empresario estuvo a cargo del abogado de la familia. Por su parte el trámite para retirar el cadáver de García estuvo a cargo de un allegado del septuagenario.