El Boca de las dudas fue bicampeón de punta a punta

Discutido, criticado, el equipo de Guillermo Barros Schellotto se consagró en la SuperLiga y sepultó todas las dudas en la recta final del campeonato. Puntero desde la primera fecha, fue el mejor y es un merecido campeón.

La alegría de los jugadores de Boca, que se sacaron un peso de encima y ahora van por el objetivo de la clasificación a los octavos de final de la Copa Libertadores. (Foto: Noticias Argentinas)

9 de Mayo de 2018 23:50

Por Redacción 0223

PARA 0223

Sin brillar, con lo que le queda de resto físico a sus jugadores y con mucha tensión, Boca hizo lo que tenía que hacer y se sacó la mochila más pesada al igualar 2 a 2 ante Gimnasia y Esgrima de La Plata en el partido pendiente de la 25° fecha de la Superliga del fútbol argentino y sumó una nueva estrella, segunda consecutiva, a su escudo. Los dirigidos por Guillermo Barros Schellotto monopolizaron la cima de la tabla de posiciones desde el comienzo del torneo y nunca nadie lo pudo superar, lo que tira por la borda las críticas y las dudas de sus merecimientos. Ahora, los "xeneizes" saben que deberán vencer a Alianza Lima de Perú, esperar una mano de Palmeiras y avanzar a los octavos de final de la Copa Libertadores para darle más valor a este título.

De esta manera, Boca sumó su título número 33 en el ámbito local (27 en la era profesional y 6 en la etapa del amateurismo) y es el séptimo bicampeonato que logra desde 1931 (1934-1935, 1943- 1944, 1964-1965, Metropolitano y Nacional 1976, Apertura 1998 y Clausura 1999, Apertura 2005 y Clausura 2006, 2016/17 y 2017/18). Ahora, en la temporada que viene buscará ganar por primera vez en su historia el tricampeonato.

El "lobo" salió decidido a evitar que Boca le diera la vuelta olímpica en su estadio y ante su gente, y por eso apretó en cada sector del campo, con un Rinaudo que se multiplicó y un Colazo que trató de imponer su atildada zurda. Sin embargo, el que abrió el marcador fue Boca, luego que Pablo Pérez comandó un buen ataque, cedió a Pavón, éste mandó un centro que Abila le bajó al propio Pérez, quien definió junto al palo derecho de Arias. Ahí pareció que Boca se sintió un poco más aliviado por ya ir encaminándose al título, pero Gimnasia -un equipo golpeado por las últimas caídas- fue en busca del empate, y llegó luego de un remate de Faravelli que Colazo desvió a la red.

Pablo Pérez quiso hacerse dueño del balón, pero algo hizo que no pudiera conectar con Pavón, ni Tevez, lo que provocó que Boca casi no tuviera acciones de gol. Incluso el "lobo" trató de sorprender a Rossi con remates desde afuera del área, primero con un disparo de Alemán que se fue cerca y con un tiro de Colazo que sacó el arquero al córner.

Para el complemento Boca pareció sufrir el partido, porque si bien mostró mejor juego que en el inicio, llegó pocas veces a posición de gol, hasta que apareció "Wanchope". El cordobés apuró a Guanini y lo obligó a equivocarse, y así quedó solo ante Arias, al que sentenció sin complicaciones para poner a Boca a un paso del título. El "mellizo" sacó a un Tevez muy flojo y metió a Junior Benítez para darle algo de oxígeno a un mediocampo que luchó mucho, aunque sin tanto juego.

A su vez, Gimnasia apostó a las experiencias de Licht y Alemán para poder, en los últimos minutos, y así pudo alcanzar de manera fortuita el empate, con un remate de Alemán que se desvió en Magallán y dejó sin chances a Rossi. Para el final, la angustia se apoderó de Boca, ante un Gimnasia que quiso hacer la heroica, pero no le alcanzó la "nafta" y por eso el "xeneize" se quedó con un nuevo título del fútbol argentino.