Vidal y Kicillof se meten en la campaña marplatense

Vidal vino el viernes último a Mar del Plata. Kicillof llegará este viernes.

9 de Octubre de 2019 21:03

María Eugenia Vidal sabe que revertir los 17 puntos de ventaja que le sacó Axel Kicillof en las Paso del 11 de agosto es una tarea muy compleja. Casi imposible. Pero en el entorno de la gobernadora no bajan los brazos. “Imposible era que ganáramos la provincia en 2015 y lo hicimos”, repiten. Con la épica en la primera página del manual de campaña, la mandataria provincial sabe que Mar del Plata cumple un rol clave en su estrategia y con un bonus: si logra crecer algunos puntos en la ciudad, donde ganó en las Paso, puede empujar al triunfo a su delfín Guillermo Montenegro. Por eso vino la semana pasada y por eso volverá antes del 27 de octubre.

En la vereda de enfrente también son conscientes del peso electoral que tiene Mar del Plata. Por eso, este viernes Kicillof desembarcará en la ciudad para darle su respaldo a la candidata a intendenta Fernanda Raverta, quien trabaja para que su imagen adherida a la del candidato a gobernador y a la de Alberto Fernández para reducir el corte de boleta que sufrió el 11 de agosto.

La gobernadora realizó una actividad en el Puerto de Mar del Plata, donde anunció la entrega de créditos para empresarios del sector y luego compartió un almuerzo en el Torreón del Monje con algunos de sus funcionarios, Montenegro, y varios de los dirigentes que están trabajando con el candidato a intendente de Mar del Plata.

Aprovechó ese lugar para dar las únicas dos entrevistas que otorgó a medios de la ciudad –entre ellos a 0223- y, lógicamente, darle un impulso a la candidatura del exministro de Seguridad. Vidal mencionó que trabajaron juntos en la Ciudad de Buenos Aires, destacó su capacidad de gestión y dijo que tiene las condiciones necesarias para poner de pie a Mar del Plata.

Vidal también le permitió a Montenegro seguir con su principal eje de campaña la última semana: la seguridad. El diputado nacional se subió al tema a partir del desembarco de la escuela de gendarmes en el complejo turístico de Chapadmalal y sostuvo que esa decisión de la ministra Patricia Bullrich fue el cumplimiento de una promesa que había hecho el gobierno nacional de sostener a las fuerzas federales en Mar del Plata.

El candidato de Juntos por el Cambio aprovechó, luego, la polémica desatada por la frase de Kicillof acerca de la venta de drogas, para cuestionarlo y pararse en la vereda de enfrente. Montenegro sabe que la inseguridad aparece siempre entre las principales preocupaciones de los marplatenses y está convencido de que su experiencia en la materia le permiten sacarle ventaja a sus adversarios.

En Mar del Plata, Vidal logró ganarle a Kicillof en las Paso, por eso la gobernadora ya vino dos veces a la ciudad y piensa volver, al menos, una vez más antes del 27 de octubre. “Tenemos que cuidar estos votos y creemos que Mar del Plata es uno de los distritos en donde podemos crecer”, analizan desde su entorno.

Ese análisis es celebrado en el entorno de Montenegro, porque si Vidal consigue eso, el diputado nacional estará más cerca de convertirse en el próximo intendente.

Raverta recibirá este viernes a Kicillof en Mar del Plata. El exministro de Economía tiene una estrecha relación con la candidata a intendenta (suelen sentarse juntos en la Cámara de Diputados de la Nación) y esta será la cuarta visita a la ciudad en el año.

Kicillof vino en plena temporada de verano, cuando su candidatura a gobernadora era apenas una idea de algunos, mientras muchos otros creían que era imposible que se materialice. Aquel día de enero, caluroso, el exministro de Economía charló con los empresarios más importantes de la ciudad en el Mar del Plata Golf Club y luego realizó una caminata por los balnearios de La Perla con Raverta.

La segunda visita fue a principios de julio, cuando ambos ya eran candidatos por el Frente de Todos y compartieron un acto en el club Talleres y ese mismo mes Kicillof volvió a Mar del Plata para sentarse en la primera fila del Teatro Auditorium, donde Cristina Kirchner presentó Sinceramente.

El candidato a gobernador sacó en Mar del Plata 11 puntos más que Raverta, por lo que ambos trabajarán fuertemente en la idea de tener un gobierno nacional, provincial y municipal alineado para potenciar la gestión en la ciudad. El acto que encabezarán este viernes por la tarde será en la Plaza Italia, en el corazón del puerto de Mar del Plata. El lugar no fue elegido al azar: los resultados por circuito electoral muestran que en el 364 Juntos por el Cambios (sumando los votos de Montenegro y Baragiola ) derrotó al Frente de Todos y el exitendente Gustavo Pulti tuvo una buena performance.

La próxima semana en el equipo de Raverta esperan que el impulso que le dé Kicillof a su candidatura quede refrendado con la presencia del candidato a presidente Alberto Fernández.

Mientras los dirigentes provinciales y nacionales hacen foco en Mar del Plata, Gustavo Pulti continúa con su campaña hiperlocal. El líder de Acción Marplatense busca instalar la idea de que las elecciones provinciales y nacionales ya están resueltas y que el 27 de octubre los marplatenses deben elegir al mejor dirigente para que gobierne la ciudad.

Sin una Vidal o un Kicillof que venga a respaldar su candidatura, el exintendente potencia su estrategia de anunciar planes para su gestión, en caso de que sea electo en los comicios. Este jueves, por caso, anunciará su plan en materia de seguridad y dará a conocer a la persona que estará al frente del área.

Santiago Bonifatti, en tanto, aguarda la visita del candidato de Consenso Federal Roberto Lavagna, quien se hará presente en el Coloquio de Idea que se desarrollará en Mar del Plata, entre el 16 y el 18 de octubre próximo. El candidato a intendente, a su vez, le sacó provecho a la visita que realizó días atrás a Salta, donde fue acompañado por varios empresarios de la ciudad. Allí, se reunió con el gobernador Juan Manuel Urtubey y con los responsables que posicionaron a la provincia como uno de los principales destinos turísticos del país.