Gimnasia en la tercera edad: entre la ausencia del Estado y lo que permite la jubilación mínima

Un grupo de adultos mayores que realizaban actividades en la pileta del CEF N°1, señalaron la importancia del ejercicio físico a su edad y los perjuicios que sintieron tras el cierre del natatorio en abril de 2018.

Imagen ilustrativa.

14 de Abril de 2019 12:28

Hacer ejercicio físico es para todas las personas una necesidad, pero para los adultos mayores es más que esencial. No practicarlo les podría provocar perjuicios en su salud irrecuperables.

Oscar Fourcada, Griselda Pintos, Rosalía "Coca" Méndez, Silvana Santos, Rosa de la Hoz, Ramón Jorge Carán, Beatriz Quaini, María Mónica Schefer, y Carmen Aquile tienen entre 60 y 80 años. Todos compartían hasta hace un año clases en la pileta cubierta del Centro de Educación Física N°1 ubicada en la costa y Alsina que cerró el 17 de abril de 2018 por una pérdida de gas y reabrirá sus puertas en los próximos meses después de que este lunes el intendente Carlos Arroyos anunciara una inversión de entre 30 y 40 millones del Fondo de Financiamiento Educativo.

Algunos practicaban Aquagym, otros pileta escuela, pero la mayoría pileta terapéutica, debido a los problemas de salud que enfrentan propios de su edad. Este tipo de ejercicio moderado utiliza las propiedades acuáticas para sanar enfermedades a través de un trabajo correctivo y preventivo.

"El agua funciona como soporte, alivianando el cuerpo y facilitando los movimientos o resistiéndolos,  buscando así un trabajo muscular activo, fortaleciendo los distintos grupos musculares, todo ello a través de ejercicios de fácil ejecución y con movimientos controlados", explicó a 0223 la profesora de Educación Física, especialista en natación, gimnasia acuática terapéutica y acuapower Eleonora Chiodi.  Según indicó "es un trabajo individual y de baja intensidad" para el cual no es necesario saber nadar. "Tampoco tiene límite de edad ni condición física", señaló la docente.

Mujeres y hombres que realizan gimnasia acuática terapéutica en la pileta del CEF N°1.

"Adentro del agua yo siento que me puedo mover sin problemas", cuenta una de las mujeres en la entrada al natatorio. Junto a sus compañeros se reunieron este martes en representación a todo el grupo de alumnos de la tercera edad para celebrar el acuerdo del Ejecutivo local con el estado bonaerense, pero también a pedir que el reacondicionamiento del natatorio se haga pronto.

Dicen que no pueden esperar más tiempo, 365 días sin poder hacer el único ejercicio que les hace bien es suficiente.

Un gran porcentaje padece artrosis, otros artritis. Tienen problemas de columna y de rodillas. Sufren asma, hipertensión o diabates. Es por ello que sus médicos de cabecera les recetaron realizar actividad física en el agua. 

"En la pileta no hay riesgo de caernos ni golpearnos, nos sentimos como que no pesamos", cuentan.

La jubilación mínima de un argentino alcanzó a los $10.400 en marzo. Con ese ingreso mensual es imposible que un adulto mayor pueda acceder a un natatorio privado en el que una cuota promedio los $1300.

Por ello, los integrantes del grupo cuentan que a quienes la salud se lo permitió decidieron salir a caminar los días lindos por la costa o se anotaron en alguna otra actividad gratuita de las que ofrece en Centro de Educación Física. "Nosotras empezamos mambo", explica Beatriz.

Oscar señala que vive cerca de la pileta cubierta del CEF y "todas las otras que hay por la zona son muy caras". "No las puedo pagar", afirma.

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Carmen dice que antes le tenía miedo al agua, pero que justo cuando la estaban por pasar a la pileta más grande, el lugar cerró sus puertas. El natatorio cuenta con tres piletas: una chica, una mediana y una semiolímpica.

La pileta del CEF N°1 cerró el 17 de abril de 2018 tras un llamado anónimo que denunció una pérdida de gas y provocó que Camuzzi retirara el medidor. A pesar de los reclamos de los alumnos y docentes del lugar, el espacio se mantiene clausurado hasta la actualidad. Sin embargo, el intendente Arroyo anunció días atrás que se destinarán entre 30 y 40 millones del Fondo de Financiamiento Educativo para realizar las reparaciones y comprar calderas nuevas.

"Celebramos el anuncio pero queremos que las obras empiecen ya", señala por su parte Adrián, alumno de pileta escuela. 

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