El incendio en el Amazonas llegó a Perú, Bolivia y Ecuador

El Centro de Operaciones de Emergencia Regional de la región de Madre de Dios detectó una campa de humo en los cielos de la provincia amazónica de Tambopata.

22 de Agosto de 2019 12:32

Por Redacción 0223

PARA 0223

La dramática situación en la selva del Amazonas en Brasil afectó países sudamericanos como Ecuador, Perú y Bolivia. Según informaron medios internacionales, las autoridades peruanas informaron que una "capa fina de humo” apareció en los cielos de la provincia amazónica de Tambopata "por efecto del aire que llega desde Brasil y Bolivia”, según el Centro de Operaciones de Emergencia Regional de la región de Madre de Dios.

Según relataron, el fenómeno es percibido por la población como un olor "aún no potente”, por lo que de momento no se han tomado medidas de emergencia, aunque la calidad del aire es vigilada por el Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología (Senamhi) y otras instituciones competentes. De acuerdo con diversos reportes, la magnitud de los siniestros que afecta a la selva amazónica es histórica.

Aunque no hay todavía un reporte oficial sobre cuánta superficie ha resultado dañada, se estima que son miles las hectáreas consumidas por el fuego en los estados brasileños de Rondonia, Mato Grosso y Mato Grosso del Sur, y en el departamento boliviano de Santa Cruz.

Por otra parte, la Unión Europea, que cerró un mes atrás un importante acuerdo económico con el Mercosur, planteó sus reparos frente al alarmante aumento en las cifras de deforestación e incendios. En este marco, Bolsonaro le recordó a una periodista europea que “el Amazonas es nuestro, no de ustedes”, y acusó al continente de querer apropiarse de las riquezas naturales de Brasil. “Brasil es como la virgen que desean todos los extranjeros pervertidos”, agregó.

El presidente considera que las voces internacionales que piden preservar el bosque están sumidos en una “psicosis medioambientalista”. Ante la tensión con Francia por la política de cambio climático y medioambiente, Bolsonaro canceló repentinamente una reunión del 29 de julio con el canciller francés Jean Le Drian. 

El aumento de tala de árboles en el pulmón verde del planeta ha llevado, además, a Noruega y Alemania a suspender partidas destinadas al Fondo Amazonia, dedicado a la protección ambiental en Brasil, y del que ambos países son los principales patrocinadores.

Noruega anunció el jueves pasado el bloqueo de 30 millones de euros para programas del Fondo, para el cual el país escandinavo aportó un 93,5 por ciento del total del presupuesto que esa estructura recibió entre 2008 y 2018. Alemania, por su parte, aportó un 5,7 por ciento, y la estatal brasileña Petrobras, el 0,5 restante. El gobierno alemán ya había bloqueado el pasado 10 de agosto unos 35 millones de euros de distintos programas, hasta tanto las cifras de deforestación volvieran a ser alentadoras, o al menos se estabilizaran.

En Ecuador, en tanto, diversos colectivos ambientalistas convocaron a manifestaciones para exigir que el gobierno brasileño haga algo para detener la expansión del fuego. 

Los grupos ambientalistas aseguran que la catástrofe comenzó por la quema de bosques para liberar espacio para uso ganadero o explotación minera. Entre enero y el 19 de agosto se han registrado 72.843 focos de incendios forestales en Brasil, un 83 por ciento más que en el mismo período del año pasado, según el Programa de Quemas del Instituto Nacional de Investigaciones Espaciales (INPE).

Por último, mientras la oposición pide juicio político contra el ministro de Medio Ambiente de Jair Bolsonaro, Marina Silva, a cargo de la cartera de Medio Ambiente durante el primer gobierno de Lula que "el Amazonas está en llamas. El Ministro de Medio Ambiente habla de noticias falsas y sensacionalismo. El presidente dice que Ngos puede estar detrás de esto. La falta de compromiso con la verdad es una patología crónica. Esta postura irresponsable sólo agravó la emergencia ambiental en Brasil.