Cardiólogo asesinado: condenaron a la policía Rosa Saino a prisión perpetua

Lo decidió por unanimidad el Tribunal Oral en lo Criminal 4 que también absolvió a Erika Córdoba. El crimen ocurrió en marzo de 2017.

Rosa Saino

4 de Marzo de 2020 13:20

Por Redacción 0223

PARA 0223

Una hora y veinte minutos demandó la lectura completa de la sentencia por parte del Tribunal Oral en lo Criminal 4 tras la que se condenó por unanimidad a la policía Rosa Saino a prisión perpetua por el crimen del cardiólogo Roberto Tortorella, cometido en marzo de 2017. En el mismo fallo se resolvió la absolución de Erika Córdoba al no acreditarse su participación en los hechos.

A partir de la decisión del Tribunal de dictar la pena a prisión perpetua por el delito de robo agravado por el uso de arma impropia y por su condición de policía y homicidio criminis causa, el fiscal Leandro Arévalo solicitará esta tarde la revocatoria del arresto domiciliario que cumple Saino y su traslado a una Unidad del Servicio Penitenciario Bonaerense.

Apenas conocida la decisión de los jueces Jorge Peralta, Gustavo Fissore y Silvina Darmandrail, la abogada de la familia de la víctima sostuvo que estaban conformes con la decisión y que ahora aguardan la realización del otro juicio para resolver la responsabilidad que tuvo Débora Faijós en el hecho. En tal sentido la abogada Liliana Pérez recordó que la intención es realizarlo este mismo año tras la convocatoria a nuevos posibles jurados, luego de que debiera suspenderse el mes pasado al no poder seleccionar doce jurados titulares y seis suplentes.

El hecho

Según la investigación, el médico de 72 años había mantenido, hasta dos semanas antes de su asesinato, una relación con Faijós e incluso la mujer de 30 años había pernoctado en más de una oportunidad en la casa del hombre en el barrio Colinalegre. De acuerdo a la reconstrucción que hizo el fiscal, Tortorella fue brutalmente atacado por Faijós y la entonces policía Rosa Saino para robarle varias pertenencias y obligarlo a entregar las contraseñas de sus tarjetas bancarias.

Las mujeres cargaron al médico –maniatado y golpeado- a bordo del rodado Thiggo y “con el fin de asegurar la muerte del nombrado, le colocaron dos pares de medias en el interior de su boca a los fines de provocar una asfixia mecánica; lo que contribuyó a su deceso entre la noche del viernes 17 de marzo y madrugada del sábado 18 de marzo de 2017, por paro cardiorespiratorio secundario a politraumatismo de etiolgía homicida”.

El cuerpo semi enterrado en el camino vecinal Los Ortiz fue descubierto la tarde del sábado por una mujer que circulaba por el lugar mientras que la camioneta Chery Tiggo del médico fue hallada una semana más tarde por personal de la comisaría decimosexta en la esquina de Rufino Inda y calle 31.