Tratamiento con plasma: "No hay ninguna evidencia que demuestre su efectividad"

Lo advirtió Ignacio Mackinnon, director del Instituto de Investigaciones Clínicas de Mar del Plata. "Es más correcto incluir un paciente en un ensayo clínico que en un tratamiento compasivo", sostuvo el profesional.

11 de Julio de 2020 14:06

Desconocimiento. Desinformación. Desesperación. Ésas son las causas que atribuye Ignacio Mackinnon, quien está al frente del Instituto de Investigaciones Clínicas de Mar del Plata, para entender la gran imagen positiva que se creó en torno al plasma, el material sanguíneo que hoy es una de las principales apuestas de las autoridades sanitarias de Argentina y otros países del mundo para revertir los casos graves de coronavirus cuando, en verdad, aún no hay ninguna evidencia científica que respalde su aplicación.

En los tiempos de incertidumbre que envuelve esta pandemia, el profesional de la salud cuestionó que se recurra a este tipo de transfusiones como un "tratamiento compasivo" para los pacientes pese a que los efectos que produce en el organismo "todavía están en etapa de investigación" para la ciencia. "Se cree que puede ser un recurso útil pero la verdad es que no se sabe si efectivamente lo es o no", apuntó, en declaraciones a 0223.

Mackinnon dijo que el único trabajo publicado sobre los resultados del plasma corresponde a China: abarcó a 103 pacientes, desde febrero a abril, y concluyó que "el plasma no ayuda pero que tampoco perjudica". "Eso no tiene poder suficiente para decir si sirve o no", aclaró, y agregó: "Hay otros 98 ensayos clínicos que están en curso y yo espero que tengamos los primeros resultados de acá a un mes".

Argentina tiene una pequeña participación dentro del listado que involucra a casi un centenar de ensayos clínicos que intentan probar la efectividad de la administración temprana de plasma a pacientes infectados con Covid-19: uno es patrocinado por las autoridades del Hospital Italiano de Buenos Aires y otro por la Fundación Infant, y ambos se desarrollan en múltiples instituciones que se distribuyen en distintas regiones sanitarias del territorio nacional.

Días atrás, el director del instituto ubicado sobre la Avenida Colón al 3364 encabezó un encuentro virtual con la Asociación de Médicos Municipales de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (Caba), donde se manifestó profunda preocupación por la "presión" que recibían los trabajadores en cuanto a la demanda de plasma. "El problema que nos planteaban es que todos los pacientes con Covid-19, ya sea leves, moderados o graves, demandaban plasma y ellos no sabían cómo responder ante eso porque en la mayoría de los lugares tampoco tenían forma de suministrarlo", comentó.

El especialista en investigación clínica entendió que tanto Argentina como Estados Unidos y otros países promueven el uso del plasma por "desesperación, desinformación y desconocimiento". "Es más correcto incluir un paciente en un ensayo clínico que en un tratamiento compasivo de plasma. Por lo menos en el primer caso pueden obtenerse conclusiones. El segundo es sólo un expresión de voluntad", sentenció y puntualizó, por otra parte: "El Gobierno de la Provincia de Buenos Aires fue uno de los que más impulsó el uso del plasma en los pacientes con Covid-19, no tanto así el Ministerio de Salud de la Nación, que no fue tan lejos con la cuestión publicitaria".

En Mar del Plata, se realizaron este sábado por la madrugada las primeras dos transfusiones de plasma a pacientes con coronavirus. Los procedimientos se aplicaron en el Hospital Interzonal General de Agudos (Higa) y el sanatorio Bernardo Houssay a una mujer y un hombre, de entre 60 y 70 años, que tienen indicación de iniciar una asistencia respiratoria mecánica por la gravedad del cuadro que padecen a causa de la enfermedad.

Hasta la fecha, Mackinnon aseguró que hay un "montón" de estudios en el mundo que ya descartaron distintas posibilidades de combatir el coronavirus y dijo que el único medicamento "probado como útil" para casos "moderados a severos" es el corticoide Dexametasona. "Se comprobó que este antiinflamatorio dado en dosis de 6 miligramos, durante diez días, todos los días, mejora la mortalidad y el ingreso a ventilación mecánica", detalló.

El profesional recordó que el Instituto de Investigaciones Clínicas, con 14 años de trayectoria en Mar del Plata, ha realizado 160 ensayos clínicos desde su fundación sobre distintos medicamentos en distintas especialidades y que la labor desde marzo, producto de la irrupción de la pandemia, dificultó la continuidad de las prácticas que se suelen realizar porque involucra la participación de personas que hoy son consideradas como "grupos de riesgo" en la emergencia sanitaria.

"Nos vimos bastante afectados y buscamos distintas alternativas para que las personas puedan seguir con su participación, seguir recibiendo sus tratamientos y seguir teniendo sus controles. Hacemos la mayoría de las visitas a domicilio y en los casos de personas que son más sanas y tienen más movilidad, los invitamos a la institución", comentó.