Morales quiere más peronismo en Juntos y rechaza a Milei: “No podemos tirar granadas que nos exploten a nosotros”

En una entrevista con 0223, el gobernador de Jujuy que lidera la UCR nacional pidió llegar al 2023 con un plan "claro" de Gobierno. "No puede haber tanta tecnocracia. Antes teníamos al 'equipo maravilla' y al final defraudamos a la sociedad", apuntó, en tono de reproche a Mauricio Macri.

En Mar del Plata, Morales ratifica su aspiración presidencial de cara al 2023. Fotos: 0223.

31 de Diciembre de 2021 08:19

“Con la grieta nos peleamos todos y se jode la gente”, resume Gerardo Morales, el principal líder que hoy tiene la Unión Cívica Radical (UCR) en el país, a la hora de justificar su pedido para que Juntos por el Cambio (JxC) incorpore a nuevos sectores del peronismo y se consolide como una opción electoral de “centro” en la disputa que habrá por la presidencia en el 2023.

El gobernador de Jujuy insiste en que la coalición debe “abrirse más” pero tampoco tanto: señala a Javier Milei, el economista liberal que después de los últimos comicios dio señales de acercamiento con Patricia Bullrich y otros referentes del PRO, como el “límite” que no debe cruzar la fuerza. “No podemos tirarnos granadas que nos exploten a nosotros. Lo de Milei es una falta de respeto”, apunta.

Morales, que ratifica su decisión de ser candidato a presidente por JxC en el 2023, marca la cancha y dice apostar por un modelo económico “desarrollista y productivista” y reitera la importancia de trazar un plan “claro” de Gobierno en estos dos años, después de hacer énfasis en que hubo "muchos errores" durante la presidencia de Mauricio Macri.

“Espero que podamos llegar al Gobierno en 2023 con un plan y con una conducción ministerial con más política, con más líderes fuertes que tengan en claro que tienen ejecutar ese plan y que no haya tanta tecnocracia… porque antes teníamos al 'equipo maravilla' del mundo y terminamos defraudando a un conjunto de la sociedad que tenía en expectativa en nosotros”, sostiene, en un mano a mano con 0223.

Morales también se reunió con el intendente Guillermo Montenegro y abogó por atender las necesidades de cada jefe comunal de la coalición en el país.

El mandatario jujeño dijo presente este miércoles en Mar del Plata para encabezar una amplia reunión con correligionarios y trazar la agenda política del 2022, que se anticipa como un año “muy intenso” a pesar de la ausencia de elecciones en el calendario. En febrero, por lo pronto, la UCR tiene previsto dos encuentros claves, uno de los cuales volverá a tener como epicentro a la ciudad, y también está programado un congreso nacional de JxC para abril. “El 2022 va a ser un año hermoso, de mucho trabajo y de ordenaros hacia adentro para dar todos los debates que hay dar”, afirma Morales.

 -¿Qué fue lo que habló en Mar del Plata?

-Se charlaron fundamentalmente ejes organizativos, planteando los desafíos que tenemos para el 2022. Creo que es un momento para fortalecer el partido, pararlo bien, así que hablamos de la agenda de la UCR pero también de la agenda de Juntos por el Cambio. El 2022 es un año muy importante para trabajar el plan de Gobierno y debatir temas, que es lo que espera la sociedad. Tenemos que tener un plan que le diga a los argentinos qué es lo que vamos a hacer si llegamos a Gobierno en el 2023. Me parece que esa es una tarea fuerte que tenemos en el 2022. Yo creo que va a ser hermoso el 2022, un año de mucho trabajo, de prepararnos, y también de ordenarnos hacia adentro, de dar los debates que hay que dar. Porque hay mucha gente que te para en la calle y te dicen ‘che, no se peleen…’.

-Por eso le consulto: si bien el último triunfo en las elecciones lectorales le dio más vigor y protagonismo en la UCR con la aparición de distintos candidatos, también dio la sensación que precipitó algunas tensiones internas, como la que usted tuvo con Martín Lousteau hace poquito, ¿son tensiones necesarias o no?

-Bueno sí… son discusiones que se tenían que dar. Con Martín, más allá de que tuvimos un cruce muy duro, durísimo (risas), también me junté varias veces y estoy casi todos los días en línea hablando temas con él. Creo que también demostramos la capacidad de volvernos a sentar y de dialogar y de lograr consensos. La comisión del comité nacional está unificada. También tenemos un desafío al que nos comprometimos tanto la UCR Evolución como la orgánica del partido por hacer esfuerzos para unificar el bloque de diputados nacionales. Así que estamos trabajando en eso. Acá siempre parte de razón de una parte, y parte de razón de la otra…

-¿Entonces al final se va a ver una señal de unidad en el Congreso?

-Yo creo que sí, creo que sí. Hay buen clima. Es muy importante para Juntos por el Cambio que nosotros estemos bien, unificados, sólidos y fuertes. También hay temas en el PRO y ellos están trabajando diferencias que se producen, que son típicas de las organizaciones políticas. Pero yo creo que para mediados del 2022 vamos a tener mucho más ordenado lo que son las conducciones y lo que es la institucionalidad de Juntos por el Cambio. Para marzo tenemos que tener un reglamento de funcionamiento. Estamos dándole más institucionalidad a la coordinación de las fundaciones que ya han generado trabajos sobre distintos temas. Eso es lo que viene. Estamos tirando para adelante.

-En este paso por Mar del Plata también se reunió con el intendente Montenegro, ¿no?

-Sí, me reuní con él.

Para Morales, el próximo Gobierno se tiene que construir "desde la periferia al centro".

-Obviamente que hablaron de política, ¿pero se puede saber sobre qué?

-Sí, de política hablamos pero también de temas institucionales. Nosotros vamos a conformar el foro de intendentes radicales y también hay que conformar el foro de intendentes de Juntos por el Cambio. Y bueno, también, como fuerza política, tenemos que estar atentos a las necesidades que tienen nuestros intendentes en el país, y en eso no escapa los desafíos que tiene Mar del Plata, donde el intendente es del PRO pero donde también gobernamos juntos, donde hay una participación importante del radicalismo. Hay que trabajar para los vecinos, para el pueblo, y ponernos esa agenda como prioridad porque el resto de los debates a la gente no le importa.

-Algunos dirigentes porteños del PRO suelen señalar a Montenegro como un “faro de gestión” en la Provincia. Si bien en el 2022 se terminarán de perfilar los liderazgos, ¿hoy cuál es el “faro” que tiene JxC?

-¿En persona me dice?

-Sí.

-Y yo creo que está bastante transversal; hay liderazgos varios y eso está bueno. Espero que podamos llegar al Gobierno en 2023 con un plan y con una conducción ministerial con más política, con más líderes fuertes que tengan en claro que tienen ejecutar ese plan y que no haya tanta tecnocracia… porque antes teníamos el equipo maravilla del mundo y terminamos defraudando a un conjunto de la sociedad que tenía en expectativa en nosotros. Tenemos que reconocer eso porque si no reconocemos eso nos vamos a preparar mal para el gobernar el 2023 donde no hay margen para cometer errores. Tenemos que hacer las cosas necesariamente bien.

-Pero usted ya deslizó la idea de lanzarse como candidato presidencial…

-Sí, no es una idea sino que es una decisión personal que tengo. Y espero que varios correligionarios también se animen.

Morales quiere más liderazgos políticos y menos "tecnocracia".

-¿Pero esa candidatura se va a terminar definiendo en una Paso o cómo?

-Me gustaría que primero nos pongamos de acuerdo en el partido. Pero ahí estoy hablando con algunos amigos para que se animen y jueguen porque eso le hace bien al partido. Obviamente tenemos que establecer reglas y trabajar propositivamente porque es lo que la gente quiere. Y en todo caso, hay que generar debates en términos de ideas y de planes para el país, y también de los antecedentes sobre si tenemos capacidad de gestión o no, ver qué hicimos. A partir de la capacidad de gestión, puede verse que nos podemos hacer cargo del Gobierno nacional. Esa es la más sana competencia.

Yo sí tengo la decisión. Va a ser más adelante porque primero tengo que cumplir mi responsabilidad como presidente del partido para ordenar y poner en marcha las cosas, y además tengo la tranquilidad de que me puede tocar a mí o a otro u otra. Lo que siempre hay que hacer es fortalecer el espacio, pero sobre todo vuelvo a la idea de tener un plan de Gobierno, de tener una idea claro de qué vamos a hacer con el país, en materia de derechos, de cómo nos paramos frente al  desafío de la lucha contra el cambio climático, de cómo nos paramos con un proyecto económico que, en mi opinión, tiene que ser desarrollista y productivista, y que se tiene que construir desde la periferia al centro, del interior al área núcleo del país, y muchos otros temas que hay que debatir que me parece que son los más importantes.

-Y en ese escenario de candidaturas y liderazgos, ¿Macri y Larreta qué lugar ocupan?

-Ellos tienen que decidir personalmente. Horacio, aunque no sé si lo ha hecho público pero sí lo dijo en algunas reuniones, quiere ser candidato a presidente y me parece legítimo que lo sea. No sé cuál es la opinión de Mauricio pero él tiene derecho a serlo también.

-Pero habló hace muy poco con Macri, cuando fue confirmado como presidente del comité nacional…

-Sí, fue el primero con el que hablé. Tuvimos una buena charla. Siempre pensando propositivamente en Juntos por el Cambio. Pero no me quiero meter en lo que pasa en el PRO porque ya bastante tenemos dentro del radicalismo (risas)…

-Está bien, pero con ambos hay buen diálogo.

-Sí, con Horacio había temas que tenía que aclarar con él que ya hablé y hay más cosas que tenemos que seguir dialogando. Tengo buen diálogo con Patricia (Bullrich), con Maxi Ferraro, con Miguel Pichetto, que somos los presidentes del partido que organizamos la mesa de Juntos por el Cambio. Estamos trabajando bien.

-Un año es mucho tiempo pero en política parece poco; en este 2022 que se viene, ¿cuánto margen de discusión interna queda, ya sea puertas adentro de la UCR o de todo el interbloque, para definir las cartas que se van a poner en juego en el 2023?

-Creo que el 2022 es el año donde se van a ir acomodando las cargas, donde vamos a tener que mejorar mucho nuestra capacidad de toma de decisiones y de organización de Juntos por el Cambio, que es algo difícil porque ya es difícil en el radicalismo. Por suerte, estamos todos con una muy buena energía, más allá de esta discusión que hubo en el bloque. Lo que tenemos por delante en el 2022 es eso, fortalecernos, institucionalizarnos, contar con un plan, y paralelamente se irá viendo qué figuras se quieren proyectar y ser candidatos y ellos harán su candidato y eso está bien. Después, cuando llegaremos al 2023, ya tenemos institucionalizado por ley el mecanismo de las Paso y ahí se resolverá. Pero falta mucho para eso. Por eso digo que el 2022 va a ser un año muy intenso de trabajo.

-¿Y la pandemia del coronavirus no cree que también puede condicionar en caso de que “se le vaya de las manos” al Gobierno?

-Me parece que estamos en otra instancia en el debate de la pandemia. Ya estamos tocando la tercera ola. Y no es que al Gobierno se le vaya de las manos sino a la sociedad. Hay gente que se cuida, hay gente que no se cuida, hay gente que no se quiere vacunar, tenemos de todo en una sociedad plural… Puede que eso afecte pero también es lo que está pasando en el mundo. Ahora tenemos la buena herramienta de la vacunación y hoy se ve que hay muchos contagiados pero que hay menos demanda hospitalaria. Yo creo que, no obstante eso, tenemos que seguir manteniendo la normalidad. La gente ya no da más, el tema de la educación es muy difícil de recuperar, y creo que es un desafió para todos lo que tenemos capacidad de gestión tratar de recuperar lo perdido. Hay que hacer hincapié en la responsabilidad social y mantener la normalidad lo más que se pueda, y en ese marco obviamente que la política hará lo que tenga que hacer.

-El mes pasado, Carrió dijo que si sentía maltratada, la Coalición Cívica se podía ir de JxC. Y si la UCR se siente maltratada, ¿podría suceder lo mismo o no hay chance?

-No. Nosotros no nos vamos a alejar de Juntos por el Cambio. Tampoco vamos a ser maltratados porque no nos vamos a dejar maltratar. Eso depende cada uno. Y con la Coalición tenemos una excelente relación. Son muy serios y responsables. Comparto mucho las cosas que plantean. A Miguel Pichetto también lo conozco mucho. Tengo el mayor de los respetos por él. Es una persona franca. Yo no veo eso, y como radicalismo todo lo que podamos hacer para corregir alguna situación de falta de respeto hacia la Coalición Cívica, lo vamos a hacer.

-¿Siente entonces que hubo una maduración interna en JxC, en el trato de las distintas fuerzas que la integran?

-Yo creo que faltan cosas. Falta hablar mucho. Y establecer reglas de funcionamiento, no escritas sino de actitudes entre nosotros. Hay que ordenar un poco todavía. Pero vamos bien y tengo mucha fe. Con la Coalición, yo tengo el mejor de los respetos y por Lilita también, más allá de que a veces nos cruzamos. Cada uno tiene su personalidad pero ella es importante en el espacio. Como también es importante que puedan sumarse todos los sectores del peronismo, que es lo que hicimos en Jujuy, donde tenemos un frente mucho más amplio donde está el socialismo y hay partidos provinciales. Creo que es lo que hay que hacer. Juntos por el Cambio tiene que abrirse más. No solo tiene que haber cuatro fuerzas políticas sino que tiene que abrirse más.

-¿Pero cuánto más tiene que abrirse? A Javier Milei, por ejemplo, ¿lo aceptaría?

-No, bueno, tampoco tenemos que tirarnos granadas que nos exploten a nosotros. Lo de Milei es una falta de respeto hacia el radicalismo. Lo primero tiene que haber es respeto. Además de que hay diferencias ideológicas muy profundas respecto de la visión del Estado y algunas cuestiones de la economía.

Morales apuesta por "cerrar" la grieta pero se aleja de los liberales más ortodoxos.

-Y José Luis Espert, que, en comparación, es un liberal pero con una “personalidad más moderada”, ¿lo incorporaría?

-Lo he hablado con muchos radicales y es un tema que tenemos que resolver en el radicalismo, pero yo prefiero más sectores del peronismo y de otras fuerzas que lleven a la coalición a pararse en el centro.  Me parece que el radicalismo tiene que hacer todos los esfuerzos por parar a Juntos por el Cambio en una posición de centro. Creo que ese debe ser el criterio ordenador para sumar.

Esto también nos tiene que lleva a cerrar la grieta. Con la grieta nos peleamos todos y se jode la gente. La gente solo está esperando respuestas y al que le toca gobernar, gobierna. Nosotros, obviamente, tenemos grandes diferencias y vamos a hacer todo para ganarle al kirchnerismo y al Frente de Todos, que tienen sus propias grietas y no tienen plan y han vuelto peor. Pero bueno, nosotros tenemos que demostrar que podemos hacer las cosas mejor.

“Estoy seguro de que el radicalismo va a llegar a la intendencia en Mar del Plata”

-¿Cómo ha visto el crecimiento de la UCR bonaerense en el último tiempo?

-Hay un radicalismo muy fuerte en todo el país y particularmente en la Provincia de Buenos Aires, que ha hecho una gran elección. Yo digo que si nos daban dos semanas más, ganaba Facundo (Manes). Y creo que así nos hubiese ido mejor en la elección general porque, en mi opinión con todo respeto por Diego (Santilli), Facundo era mejor candidato. Pero lo que sí se ha visto es que hay un radicalismo fuerte en la Provincia, con un trabajo territorial importantísimo y buenísimo. En general, el radicalismo está muy bien en el país. Nos fue bien en Santa Fe, en Cordoba, en Misiones, en La Pampa, Santa Cruz, y en varias provincias, además de las que gobernamos.

Junto a Maxi Abad y Guillermo Hoerth, Morales recorrió las instalaciones de uno de los astilleros más importantes de Mar del Plata.

-Y a partir de Maxi Abad y la aparición de otras caras nuevas y jóvenes en el partido, ¿se ilusiona con las perspectivas de futuro que puede tener la UCR en Mar del Plata y la Provincia?

-La verdad que Maxi ha atraído a un grupo de hombres y mujeres que están trabajando muy bien en Mar del Plata y la Provincia. Acá en la ciudad siempre ha habido un partido fuerte. Yo recién les decía que estoy seguro de que vamos a llegar a la intendencia en Mar del Plata. Hay un partido mucho más fuerte y organizado. Yo estuve en 2008, cuando mitad del partido se fue con el kirchnerismo y tuvimos que sostener cada comité en la Provincia, que es un país dentro de un país. Es tremendo, y yo digo que la Provincia de Buenos Aires es la copia exacta de lo que pasa en el resto del país, sacando Caba. Yo estoy muy entusiasmado con la fuerza, con lo que se ha hecho y con la potencia del radicalismo bonaerense, que está aportando lo mejor no solo a la UCR sino a Juntos por el Cambio.