Con 113 años, Casilda se convirtió en la cuarta vacunada más longeva del mundo

La mujer que reside en un hogar de la zona de Mar del Plata fue inmunizada contra el coronavirus.

Casilda Ramona Benegas de Gallego recibió la vacuna contra el coronavirus en el hogar geriátrico de zona norte en el que reside.

30 de Marzo de 2021 15:26

Por Redacción 0223

PARA 0223

Casilda Ramona Benegas de Gallego, la mujer de 113 años que reside en un hogar de larga estadía en Mar del Plata, recibió este martes su primera dosis de la vacuna rusa Sputnik V y se transformó en la cuarta persona vacunada contra el coronavirus más longeva del mundo.

La mujer paraguaya - argentina, a punto de cumplir 114 el próximo 8 de abril, fue vacunada por personal del Programa de Atención Médica Integral (Pami) en la residencia de la zona norte de Mar del Plata en la que vive. De esta manera, se convirtió en la cuarta persona más longeva en ser inoculada, detrás de Antonia da Santa Cruz, de 115 años, de Brasil; María Branyas Morera, de 114 años, de España; y Phyllis Ridgway, de 114 años, de Canadá.

Como en todo el mundo, los hogares de adultos mayores fueron una de las instituciones más afectadas por el avance del virus, que a mediados de diciembre pasado irrumpió en su residencia. Cursó la infección asintomática y nueve días después superó la enfermedad con 113 años y 259 días de vida.

Benegas de Gallego, además, es la persona viva más longeva de Argentina, la más longeva en toda la historia del país y la segunda persona más longeva del mundo en recuperarse del coronavirus, detrás de la española Branyas, nacida el 4 de marzo de 1907, según el sitio especializado Gerontology Wiki.

La mujer supercentenaria nació en el departamento de Itapúa, Paraguay. De grande se casó con un español y en 1945 abandonó su tierra natal. Se asentaron en el norte argentino: primero en Jujuy, luego en Corrientes y por último en Chaco, hasta que finalmente se trasladaron de manera definitiva a Mar del Plata. En el 2000 se fue vivir a España junto a su familia, pero en 2013 retornó a La Feliz. A lo largo de su vida, Casilda fue ama de casa. Se dedicó a cuidar a sus dos hijos y a sus nietos.

A mediados de marzo, su bisnieta Mayra había contado a 0223 que "siempre fue muy sana". "Siempre fue una mujer muy alegre, yo nunca la vi enojada. No es que mantiene una dieta estricta y sana, siempre comió y tomó lo que quiso. Tiene un estomago de hierro que ni el coronavirus le pudo arrancar", había revelado.