Se profundiza la crisis en Garbarino: los trabajadores siguen sin fecha de cobro

Los empleados de la única sucursal de la empresa de electrodomésticos que permanece en pie conviven bajo amenaza de no cobrar las sumas adeudadas si vuelven a cerrar las puertas del negocio.

Garbarino reabrió sus puertas a fines de agosto, tras permanecer casi dos meses cerrado por el conflicto salarial. Foto: 0223.

27 de Septiembre de 2021 08:09

Por Redacción 0223

PARA 0223

Al cumplirse un mes de la reapertura de la sucursal de Garbarino en Mar del Plata tras permanecer cerrada durante casi dos meses, la crisis se acentúa puertas adentro y los trabajadores siguen sin novedades para cobrar los salarios adeudados. Mientras tanto, conviven bajo amenaza por parte de los directivos: si vuelven a cerrar - les aseguran - no cobrarán un solo peso.

"Estamos a la espera de que haya alguna novedad. Nos piden que abramos tres horas por día, pero no sabemos si vamos a cobrar o no; si hay un nuevo comprador. No hay ninguna novedad de nada", aseveró Ángeles Roubiet, delegada gremial del Sindicato de Empleados de Comercio.

La representante explicó a 0223 que los empleados mantienen abierta la sucursal de Rivadavia 3045 entre las 10 y las 13, aunque acusó múltiples limitaciones para realizar cualquier tipo de operación: solo pueden vender mercadería mediante medios electrónicos - y con recargo - y los pocos productos que quedan en el local son en consignación.

Roubiet denunció que no es la primera vez que las autoridades de Garbarino obligan a los empleados a mantener abierta la sucursal bajo la advertencia de no cobrar los salarios si ocurre lo contrario. "Nos pidieron que siguiéramos abierto para cobrar la plata, sino no cobramos nada. A partir de ahí no tuvimos más contacto", confió.

Se estima que cerca de 30 trabajadores de Mar del Plata están afectados por la crisis que atraviesa Garbarino. La empresa de electrodomésticos les adeuda el 20% del salario de abril y los sueldos de mayo, junio, julio, agosto y el aguinaldo, entre otros.

"Es terrible la situación que estamos pasando. Nosotros apuntamos a que nos paguen lo que nos deben y a mantener los puestos de trabajo. Aguantamos lo que podemos, pero a muchos compañeros se nos hace complicado. Mantener una familia así sin cobrar es muy complejo", concluyó.