Por riesgo de conservación, le sacan el sable al Almirante Brown de La Rambla

Quienes disfruten de un paseo por La Rambla en esta temporada y sean detallistas, podrán advertir algo particular en la escultura que se luce en lo alto en representación del Almirante Guillermo Brown: sí, el militar no tiene su sable.

La falta de la espada no fue producto de un acto de vandalismo sino que fue una decisión que tomaron las autoridades de la dirección de Restauración de Monumentos Históricos de la municipalidad tras constatar un "grave daño" en la estructura.

"Entre las tareas que llevamos adelante en la intervención del monumento al Almirante Brown, retiramos el sable para restaurarlo, el daño que presentaba hacía peligrar su conservación”, justificó Constanza Addiechi, titular del área.

La funcionaria, de todos modos, aclaró que el sable "en los próximos días será restituido" para completar el trabajo propuesto para esta obra del escultor Wifredo Viladrich que fuese inaugurada el 3 de marzo de 1972.

Todas estas tareas se enmarcan en un proyecto de recuperación de la icónica Plazoleta Armada Argentina ubicada entre los edificios Casino – Hotel Provincial de la Rambla, conjunto urbano declarado Patrimonio Histórico Nacional.

Como nuevas

Addiechi también se hizo cargo de restaurar 8 farolas históricas de doble luminaria (pertenecientes al diseño del arquitecto Alejandro Bustillo de 1938), con más de 5 metros de altura y  casi 500 kilos.

Así quedaron las históricas farolas. Fotos: 0223.

Primero se habían retirado para poder trabajar sobre ellas y ahora ya volvieron a sus lugares de origen. Dos se colocaron paralelas al Boulevard Marítimo, dos paralelas al mar y dos paralelas a los edificios Casino y Hotel Provincial respectivamente.

"Las mismas fueron proyectadas para generar un círculo cuyo eje central fuese un obelisco de 14 metros de altura, como monumento recordatorio de la  inauguración oficial de las obras, idea que nunca llegó a ser realizada. Dicho espacio es hoy ocupado por la escultura del Almirante Brown", comentó Addiechi.

Hubo un arduo trabajo de restauración para dejar las luminarias prácticamente a nuevo. Foto: 0223.

Al brindar un detalle de las tareas, la especialista precisó que "se restauraron cada una de las 96 partes que componen las farolas" y dijo que "se estudió además el tipo de anclaje que garantice la seguridad del sector, el sistema de sujeción y la iluminación adecuada al sitio histórico que ocupan".

“Nos sentimos felices por el trabajo realizado y por volver a iluminar la postal de nuestra querida ciudad. Comprometernos con el cuidado de nuestro patrimonio, es proteger la historia de Mar del Plata”, concluyó la funcionaria de la gestión de Guillermo Montenegro.