Cuentas remuneradas: hacé plata sin moverte

Precios aumentando al 6 o 7% mensual y superando el 80% interanual, los pesos "queman". Algunos adelantan compran, y otros no saben qué decisión tomar cuando tampoco es tanto lo que sobre a fin de mes. Es habitual que dejemos dinero “quieto” en las cuentas bancarias a la espera de pagar la tarjeta de crédito o de sucederse los distintos débitos a los que estamos adheridos.

Lo interesante es comprender que ese dinero inmovilizado pierde valor minuto a minuto, sin embargo, existen opciones para poder sortear esta realidad de la economía argentina. El objetivo es lograr que si tenes en cuenta, por ejemplo, $50.000 cuando vayas a usarlos o retirarlos valgan más. Para tal fin existen las cuentas remuneradas o también las cajas de ahorro "anti inflación". 

Estas opciones existen hace algunos años, pero resuenan más en épocas como la actual donde las cajas de ahorro comunes no resultan un refugio. Es por eso que estas alternativas nos bridan cierto blindaje de nuestro poder adquisitivo al proporcionarnos el servicio de solamente tener allí nuestros pesos o dólares depositados y por ello recibamos un interés anual de aproximadamente 45%. 

Podrá tener sabor a poco ese “rendimiento” pero debemos comprarlo con el hecho de mantener dinero en cuenta que ira teniendo día a día menor valor. Visto de esta manera, que $100.000 se conviertan en $145.000 no sería algo a descartar considerando que podemos hacerlo con ese dinero que nos queda como flotante en la caja de ahorro a la espera de ser utilizado para ciertos pagos. 

La cuenta renumerada es una alternativa que otorgan ciertas plataformas de inversión y pago. Entre las más reconocidas figuran Invertir On Line (IOL) y Mercado Pago. Con el simple hecho de transferir allí nuestro dinero estaremos recibiendo intereses por nuestro dinero depositado.

Es importante remarcar que los intereses se generan automáticamente sin necesidad de hacer más que una transferencia desde tu CBU al CBU de la plataforma y el retiro del dinero puede ser en el momento que desees. 

Por otro lado, tenemos en ciertos bancos las cuentas "anti inflación" también conocidas como "alcancías UVA" o "cajas de ahorro UVA". Nombres que aluden a las Unidades de Valor Adquisitivo (UVA), cuyo precio se ajusta a diario según el coeficiente CER, al ritmo que marca el Índice de Precios al Consumidor del Indec.

En este casi, cada vez que depositas o recibís dinero, ya sea por transferencia o por ventanilla, los pesos se convierten en UVAs a la cotización del día y se van actualizando diariamente. Lo atractivo es que, cuando tenes la necesidad de usar los fondos, éstos se pasarán nuevamente a pesos, pero al valor que tenga cada UVA al momento de la extracción. Cotización que, mientras haya inflación, será mayor a la del día del depósito.

¿Cuánto mayor? Lo suficiente como para que la plata no haya perdido poder de compra. Los bancos, incluso, tienen la chance de pagar lo que subió la UVA más un interés extra, generando una ganancia real (suele ser mínima).

¿Desventajas? El dinero que se deja en una Alcancía UVA no puede utilizarse en cualquier momento. A partir de que ingresan los fondos, por 90 días corridos no se podrán usar. Es como si estuvieran en un plazo fijo UVA. Ahora bien, pasados esos tres meses iniciales, entonces sí, el dinero queda 100% disponible.

Sin dar un paso hacia las inversiones financieras, estas son algunas alternativas para que ese dinero que mantenes quieto en cuenta pueda estar en movimiento generando intereses extra.