Familiares de Rubén Echeverry pidieron justicia en Tribunales: “A 12 años, no hay nada”
Un pequeño grupo de personas concentró en Tucumán y Brown, cortando la calle. Advirtieron que seguirán las protestas hasta que haya una respuesta de la justicia. El crimen aún está impune.
Por Redacción 0223
PARA 0223
Amigos y familiares de Rubén Echeverry, el joven de 26 años que fue asesinado de dos puñaladas en el pecho en la madrugada del 19 de noviembre del 2010, volvieron a reclamar en la puerta de los Tribunales de Mar del Plata, donde realizaron un pacífico corte de calle pidiendo respuestas a la justicia por un crimen que aún no está resuelto.
Claudia, la hermana mayor de Rubén, contó a 0223 el dolor que atraviesan los allegados del joven, cuando hace 12 años alguien le quitó la vida de dos puñaladas en el corazón, cuando iba a trabajar a las 2.15 de la madrugada a una fábrica de pescado en el barrio Cerrito Sur.
“Estamos reclamando justicia, porque hace 12 años que mataron a Rubén cuando iba a trabajar. Se investigó y se determinó que mi hermano no tenía antecedentes, no tenía ajuste de cuentas e investigaron todo alrededor y nada. Este caso lo agarró el fiscal Lódola, después lo pasaron por dos fiscales más y no pasó nada”, recordó.
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Las tareas investigativas siempre descartaron la hipótesis del robo porque en la escena del crimen la víctima poseía dinero y otras pertenencias que llevaba camino a su trabajo. Los investigadores entendieron que el asesinato había sido el desenlace de una venganza o de algún ajuste de cuentas. Sin embargo, nunca aparecieron voces que justificaran esa hipótesis.
“Hicieron juicio a una persona (en abril del 2014) que supuestamente no era pero nuestra familia cree que este chico sabe quien fue. El tema es que no quiere hablar y uno entiende que es por miedo. Pero en el juicio lo dejaron libre y quedó en la nada. A la causa ya quisieron cerrarla dos o tres veces lo que pasa es que nosotros hinchamos. No lo vamos a dejar así porque en 12 años nunca molestamos a nadie”, señaló.
La mujer, visiblemente conmovida sostuvo que a pesar del reclamo que realizan frente a la sede judicial, “para ellos somos un número” y se mostró contrariada por los intentos de la justicia de disuadir la protesta. “Llamaron a mi mamá. Pero después nos pidieron por teléfono que si no liberábamos la calle y protestábamos en la vereda, no nos iban a atender. Nosotros decidimos que no: queremos una respuesta y que nos atiendan”, concluyó la mujer.
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