Lo asesinaron a balazos "por error": tras un año, el principal sospechoso sigue prófugo

A poco de cumplirse un año del ataque a balazos que terminó con la vida del albañil Lucas Olivera en el barrio Regional, el principal sospechoso del crimen permanece prófugo y la familia del trabajador reclama mayores esfuerzos de búsqueda por parte de las autoridades judiciales de Mar del Plata para dar avances a la causa.

En la noche del 31 de agosto, Olivera se encontraba fumando en Juan B. Justo y Mariano Acosta con un amigo. De un momento a otro, un auto se paró frente a ellos, dos hombres armados bajaron y uno de ellos acertó tres disparos contra el joven de 31 años. Un patrullero lo trasladó después hasta el Hospital Interzonal General de Agudos (Higa) Dr. Oscar Alende, donde los profesionales constataron la falta de signos vitales a causa de las heridas de bala.

Iñaki Olmos fue el hombre señalado en un primer momento por los investigadores como el autor de la balacera mortal pero, hasta la fecha, la Justicia no tiene novedades sobre su paradero. “Yo sé que el homicida y su cómplice son dueños de una vidriería y la reabrieron hace poco con otros empleados. A veces tengo que pasar con los nenes para llevarlos a la escuela así que, imagínate, un poco de miedo tenemos”, expresó Luciana, la pareja de la víctima.

Con Lucas Olivera, Luciana mantuvo una relación de diez años que le dejó tres hijos: un bebé de 2 años, una nena de seis y otra de ocho. “La nena más grande ya entiende bastante y es la que más está sufriendo todo este proceso. Y sobre todo la afectó el último Día del Padre”, lamenta la madre, en declaraciones a 0223.

Desde un principio, la mujer afirmó que su pareja fue ultimada a balazos “por error” al sostener que los asesinos iban en búsqueda del amigo que lo acompañaba, una hipótesis que hasta el momento no fue corroborada por la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) N°6, a cargo de Romina Díaz.

Ante la falta de avances, Luciana se muestra disconforme con el accionar de la fiscal que interviene en la causa y no descarta encabezar otra movilización en Tribunales a fin de mes, tal como hizo en anteriores oportunidades, al cumplirse el primer aniversario de la muerte de Olivera. “Desde la fiscalía nunca nos llamaron. Y la fiscal tampoco nos deja hacer nada”, cuestionó.

“Lo único que pido es que la fiscal nos dé permiso para que los patrulleros anden con la foto de Olmos. Ya hay un pedido de captura sobre él. El otro día le acerqué la foto a un patrullero que pasaba cerca y los policías me dijeron que no sabían nada. Y si los patrulleros de la zona no saben quién es, yo calculo que nadie debe saber. Por eso lo estoy pidiendo”, explicó la joven.

Y mientras sostiene el reclamo por Justicia, la mamá y sus hijos preparan un mural que evoca a Lucas Olivera en El Cano y 212, donde se encuentra una plaza que ayudó a armar el peón de albañil y que solía visitar con frecuencia. “No queremos que esto quede en la nada. Vamos a reclamar hasta que atrapen al asesino”, garantizó la pareja.