Máximo Thomsen rompió el silencio: "Quiero pedir disculpas porque jamás en la vida se me hubiese ocurrido matar a alguien"

El acusado que está más complicado en la causa por el crimen de Fernando Báez Sosa pidió declarar en medio de la audiencia.

16 de Enero de 2023 17:42

Por Redacción 0223

PARA 0223

Máximo Thomsen, uno de los rugbiers más complicados en la causa por el crimen de Fernando Báez Sosa, rompió el silencio este lunes en medio de la audiencia.

El imputado, que esta apuntado como el autor de la patada final que terminó con la vida de Fernando, quebró en llanto y pidió declarar: "Quiero pedir disculpas porque jamás en la vida se me hubiese ocurrido matar a alguien".

Thomsen tomó la palabra luego de escuchar a su madre declarar en el juicio: "Escuché varias cosas sobre mí varios años. No me reconocía porque generaban tanto odio hacia mi persona, yo jamás en la vida tendría esa intención”.

“Es algo que nunca en la vida hubiese buscado. Jamás en la vida hubiese sido mi intención. Quería hoy en este lugar dar la realidad de lo que pasó eso día, esa noche”, completó.

A la hora de explicar el contexto de la pelea, Thomsen aseguró que "le pegaron una piña" luego de ir detrás de un amigo "que se metió en una ronda de otras personas". La intención del imputado en este caso es intentar dar vuelta la situación, apuntando a los amigos de Fernando como los que iniciaron la pelea.

 "Reacciono tirando patadas, pero nunca con la intención de matar a nadie", insistió. Luego justificó su reacción por de meterse en la pelea "porque vi que eran muchas personas contra una".

También responsabilizó al consumo de alcohol por su violento accionar: "Estábamos mamados desde las siete de la tarde, solo quería comer". "No tengo recuerdo, estaba como en shock. Después me iban contando", agregó sobre el momento posterior a la pelea.

Rosalía Zárate, mamá de Máximo Thomsen, había tomado la palabra en la 11va jornada del juicio que mantiene en vilo a todo el país. En su declaración, Rosalía contó que tiene cáncer: “Me operé, hice rayos y quimioterapia, sigo en tratamiento. Lo dejé para poder venir acá. Lo único que hago es salir de mi casa para ir a ver a mi hijo a la cárcel e ir al medico. Así hace dos años. No puedo mas no puedo seguir sobrellevando todo esto. Es una pesadilla”.

Este lunes comenzaron los alegatos de los testigos aportados por la defensa de los rugbiers, en los cuales la mayoría están compuestos por los familiares y conocidos de los acusados, además de los dos jóvenes sobreseídos del caso Juan Pedro Guarino y Alejo Milanesi.