"Panchito" Rago, el marplatense que sacó a River de la Copa Argentina

El arquero de Temperley fue el gran héroe de la noche al atajar dos penales. Una carrera a puro empuje para convertirse en uno de los mejores de la categoría.

"Panchito" Rago tuvo su noche soñada ante River y fue el "héroe" de un triunfo histórico de Temperley.

22 de Mayo de 2024 10:15

Por Redacción 0223

PARA 0223

Juan Francisco Rago es presencia y personalidad. En Mar del Plata lo disfrutamos poco, apenas una temporada en Alvarado, porque su carrera se forjó en el ascenso metropolitano y del interior. Hijo de "Pancho", histórico arquero del fútbol marplatense, siguió su camino de gran manera, se consolidó en la máxima categoría del ascenso y es el nombre que está en todos lados este miércoles después de ser el héroe de la histórica victoria de Temperley ante River por los 16avos de final de la Copa Argentina.

La emoción de "Panchito" una vez que finalizó el partido no es sólo por lo que vivió en el "Malvinas Argentinas" de Mendoza, sino porque hay un recuerdo de lucha, de constancia para llegar a este momento. Surgido en Argentinos del Sud y con inferiores en Godoy Cruz , comenzó su carrera en Barracas Bolivar y ahí empezó un derrotero buscando el momento de dar el salto. Siempre destacándose en sus equipos, pasó por Atlético Policial de Catamarca, General Güemes de Rosario de La Frontera, Mitre, Central Córdoba y Güemes de Santiago del Estero, Libertad de Concordia y Ferro de Pico, hasta llegar a Alvarado donde su nombre tenía un peso específico en la temporada 2017/18.

Esa buena campaña en Alvarado lo catapultó al ascenso metropolitano en Atlanta, que se convirtió su casa. Fue figura del equipo que logró el salto a la Primera Nacional y terminó siendo capitán de uno de los históricos del fútbol argentino. Después de cinco temporadas, cambió de rumbo y se fue a Agropecuario de Carlos Casares, donde el arranque no fue el esperado y el entrenador Gabriel Gómez no sólo no lo usó más, sino que le tocó el orgullo. Con su personalidad, "Pancho" no se calló, le contestó y siguió entrenando pensando en su futuro. A principio de año, cuando sonaba fuerte en el "torito", le surgió una chance internacional en Sportivo Ameliano de Paraguay y allá fue. Pero le cambiaron las condiciones, pegó la vuelta y regresó sin temblarle el pulso. Una semana después, era presentado en Temperley.

En el "celeste" se ganó el puesto y mostró el rendimiento que todos le conocemos, fue clave en la primera fase de Copa Argentina al atajar un penal frente Sarmiento de Junín, pero todos los flashes llegaron ahora. Se vengó de Esequiel Barco que le había hecho un golazo de tiro libre y contuvo el último de Héctor David Martínez para desatar la fiesta "gasolera" y, a los 35 años, emocionarse como un nene, no sólo por el "Panchito" de ahora, sino por ese que batalló, que recorrió miles de kilómetros para cumplir sus sueños.