Alarma en La Costa: aparecen muertas siete grandes tortugas laúd en distintas playas

En el lapso de una semana, se registraron siete varamientos de tortugas laúd. Al intervenir veterinarios y biólogos los ejemplares ya se hallaban sin vida. ¿Cuál es la principal hipótesis de los especialistas?

Una de las inmensas tortugas laúd halladas sin vida en Lucila del Mar.

17 de Febrero de 2025 14:48

Por Redacción 0223

PARA 0223

En el lapso de una semana, se registraron siete varamientos de tortugas laúd (Dermochelys coriacea) en el partido de La Costa. Dos de ellas, en Lucila del Mar; las otras en Costa Azul, Las Toninas, San Clemente del Tuyú, Nueva Atlantis y Costa del Este. En todos los casos los animales se encontraban sin vida cuando especialistas de la fundación Mundo Marino acudieron a los lugares donde fueron halladas.

En el caso del animal encontrado en Costa Azul, el ejemplar mostraba marcas de interacción con redes de pesca en su cuerpo, lo cual alimenta la principal hipótesis hasta ahora de que murieron por ahogamiento al quedar atrapadas sin posibilidad de salir a respirar.

Además de que no es normal que estos animales aparezcan en la playa, la seguidilla de muertes preocupa a veterinarios, biólogos y autoridades de la región.

Las tortugas laúd pueden medir hasta dos metros y pesar 500 kilos.

Cronología de las apariciones de tortugas laúd muertas

  • Los dos primeros hallazgos sucedieron el 9 y 12 de febrero en La Lucila del Mar.
  • El tercer caso fue registrado el 13 de febrero en Costa Azul. 
  • Luego otros dos casos fueron registrados el 14 de febrero: uno en San Clemente y otro en Las Toninas. 
  • Finalmente, el sábado 15 de febrero otras dos tortugas Laúd fueron encontradas en Costa del Este y Nueva Atlantis. 
  • Previamente, hubo otro registro de una tortuga de esa especie el pasado 28 de enero, en la localidad de Costa Chica. 

Una de las tortugas mostraba marcas de interacción con redes de pesca en su cuerpo.

La palabra de veterinarios y biólogos

Solamente las tortugas halladas en La Lucila del Mar fueron trasladadas a la fundación Mundo Marino para realizarles una necropsia que pueda determinar las causas de su muerte. En los otros casos, se trató de animales con un avanzado estado de descomposición que imposibilitaba la toma de muestras.

Al respecto de la intervención realizada sobre los dos ejemplares examinados, Juan Pablo Loureiro, médico veterinario y director técnico de la fundación Mundo Marino, explicó detalles de lo sucedido: “Se trató de un macho y una hembra de aproximadamente 200 kilos de peso cada uno a las cuales pudimos practicarles la necropsia. Tenían buena condición corporal y un estado de descomposición inicial, que nos permitió tomar muestras y analizar sus órganos internos. Presumimos, como primera hipótesis, que se trató de una muerte por ahogamiento en redes de pesca. Incluso ambas tortugas tenían restos de alimento en sus estómagos, lo cual evidencia que se habían alimentado de manera previa a su deceso. Las muestras serán enviadas al laboratorio de la Facultad de Ciencias Veterinarias de la Universidad Nacional de La Plata para su análisis”.

Por otra parte, Karina Álvarez, bióloga y responsable de conservación de la fundación Mundo Marino, sostuvo: “El avistaje de animales vivos de esta especie suele darse en los meses de noviembre y marzo, y se relaciona también con la cantidad de medusas que puedan encontrar, dado que constituyen su principal fuente de alimento, entre otros tipos de fauna gelatinosa. Luego, entre marzo y mayo, es cuando nos encontramos con tortugas laúd muertas en la playa. Estos animales, en general, aparecen con buena condición corporal y presumimos que su causa de muerte es el ahogamiento por enmalle en redes de pesca de barcos que se encuentran mar adentro. Pero, por tener estados avanzados de descomposición, es muy difícil confirmarlo”.

Sobre las tortugas laúd

La tortuga laúd es una especie que se encuentra vulnerable, respecto a su estado de conservación, según la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) y, como sucede con otras especies de tortugas marinas que incursionan en el estuario ​del Río de la Plata y en aguas de la costa bonaerense, se encuentran amenazadas por la interacción con redes de pesca.

Únicas representantes de la familia Dermochelyidae, las laúd se diferencian de las otras tortugas más conocidas por no tener caparazón, sino que poseen una gruesa capa de piel similar al cuero y sobre la que se extienden siete crestas longitudinales. Por eso también posee el nombre común de “tortuga de siete quillas”. Pueden medir hasta dos metros y pesar 500 kilos. Tienen una distribución amplia en océanos de todo el mundo llegando, incluso, a soportar aguas de temperaturas bajas.