“Scioli nos empuja a abortar en la clandestinidad”

Desde el Colectivo de Mujeres Mumalá cuestionaron la marcha atrás en el proyecto de equipos médicos para abortos no punibles. Dijeron que el gobernador “se deja presionar por la Iglesia”. 

13 de Agosto de 2014 11:22

Por Redacción 0223

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A través de un comunicado, desde el Colectivo de Mujeres Mumalá, repudiaron “la improvisación del Ejecutivo provincial”, que anunció primero y dio marcha atrás después con la conformación de un equipo de médicos para garantizar la práctica de abortos no punibles en el ámbito público.  

“Entendemos que esta improvisación constituye una grave afrenta contra nuestra salud y desnuda la carencia de planificación y de políticas públicas del Estado provincial para garantizar los derechos de las mujeres. Pero manifiesta también una preocupante actitud del gobernador, quien demostró un peligroso desconocimiento del tema, ya que `desarrollar medidas favorables para la vida´, como dijo, contempla reducir la mortalidad de mujeres gestantes y cumplir con el fallo de la Corte Suprema de Justicia, que reafirmó en 2012 que no puede impedirse a mujeres víctimas de violación ejercer su derecho a interrumpir el embarazo -conforme lo autoriza el Código Penal desde 1921-, exhortando a cumplir con las prácticas de abortos no punibles”, explicaron las Mumalá, que ante el anuncio de la conformación del equipo habían celebrado la medida.

“Scioli parece estar dispuesto a ceder ante las presiones de la Iglesia, ya que entre el anuncio de sus funcionarios y su retractación, medió un comunicado de la Conferencia Episcopal en la misma línea de lo que luego expresara el gobernador”, advirtieron.

Desde el Movimiento de Mujeres consideraron que los funcionarios públicos “deben trabajar por el ejercicio pleno de los derechos humanos y garantizar el cumplimiento de la ley, independientemente de sus creencias religiosas”. “Las muertes de mujeres a causa de abortos clandestinos son totalmente evitables y el hecho de que prevalezca un debate de supuesta moralidad y/o religiosidad por sobre los derechos humanos y la salud pública nos parece aberrante y retrógrado”, sentenciaron, no sin destacar que si los médicos de un hospital provincial declararan en conjunto su objeción de conciencia, “sería el Ministro de Salud quien debiera arbitrar los medios necesarios para garantizar los abortos no punibles”.

“No lo decimos las organizaciones de mujeres, lo dice la ley; su incumplimiento, se traduce en graves consecuencias sobre nuestros cuerpos y nuestras vidas, lo que en este contexto es responsabilidad absoluta del gobierno provincial. La decisión de Scioli da marcha atrás con un derecho que las mujeres tenemos adquirido hace 93 años. Es totalmente absurdo que un gobernador desconozca la legislación vigente y nos empuje a las mujeres a abortar en la clandestinidad”, concluyeron desde Mumalá.

 

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