Razona: "Fui a ver a Arroyo y tuve que esperar 4 horas para que me atienda"

El exsecretario de Seguridad habló de los desencuentros con el intendente. Planteó que el rechazo de Arroyo a Rubianes fue por una denuncia de "supuesto maltrato" a un empleado municipal. "Estamos con un dolor enorme", dijo.

18 de Diciembre de 2015 13:34

Por Redacción 0223

PARA 0223

Pocas horas después de presentar su renuncia como secretario de Seguridad de General Pueyrredon, Julio Razona dijo estar “con un dolor enorme” por su salida del Ejecutivo y aclaró que el pedido de renuncia del intendente Carlos Arroyo a su equipo de directores se motivó por un reclamo del sindicato de municipales “por un supuesto maltrato” ejercido por la exdirectora de Políticas de Seguridad, Alejandra Rubianes.

“El jueves fui a las 8 con suma urgencia a reunirme con Arroyo para plantearle un pedido de auditoría al área de seguridad por distintas irregularidades que encontré junto a mi equipo de trabajo, ya que está en juego el patrimonio municipal. Y siendo el secretario de Seguridad, tuve que esperar 4 horas para que me atienda. Cuando le presento el pedido de auditoría, Arroyo me dijo que no podía contar con la doctora Rubianes ni con Fernando García López. Me dejó helado”, confesó el abogado a 0223.

Consultado acerca de si hubo una justificación por parte del jefe comunal, Razona explicó: El sindicato de municipales realizó una queja porque una empleada habría recibido un trato descortés por parte de Alejandra Rubianes. Pero ella en su momento fue a aclararle esta situación al intendente y éste jamás la recibió. Estamos con un dolor enorme”, confió.

Y en ese contexto, Razona dijo que este hecho no fue él único desencuentro con Arroyo.

“Esta semana Arroyo se entrevistó con el jefe de seguridad provincial Cristian Ritondo. ¡Y yo me enteré por los medios! Yo era en ese momento el secretario de Seguridad, responsable en la ciudad del Operativo Sol. Hubo una comunicación nula”, se quejó.

“Rubianes es la persona más capaz que conozco para hacer investigación documental en el área. Y tiene un conocimiento exhaustivo del tema. La verdad que tenemos un sabor amargo ya que teníamos muchas expectativas en esto. Y aclaro que nunca hubo ningún cortocircuito con nadie del área. Hubo mucho respeto con todos, incluso con Arroyo, que lo conocía de la función pública y no creo que obre de mala fe. Pienso y sigo pensando que es una persona respetable”, concluyó.