“Me gusta contar la parte humana de la historia”

Viviana Riveró estuvo en Mar del Plata para presentar su último libro, “Los colores de la felicidad” y anticipó que planea escribir una novela sobre las problemáticas sociales de la Argentina.

Viviana Rivero, durante la presentación de su libro en el ciclo Verano Planeta 2016.

31 de Enero de 2016 13:22

Por Redacción 0223

PARA 0223

La cordobesa Viviana Rivero volvió a Mar del Plata para presentar Los colores de la felicidad (Planeta, 2015), su último libro que ya encabeza la lista de los más leídos del verano. Su interés por la historia, su obsesión por dejar una enseñanza en cada obra y su proyecto de una comedia musical fueron algunos de los temas que abordó en una entrevista con 0223.

-¿De qué se trata “Los colores de la felicidad”?

Es una historia de amor que nace en el medio de la revolución cubana, entre una argentina que llegó a Cuba para cubrir el gran prix que iba a correr Fangio, que al final termina secuestrado por un comando al que pertenece Joel Fernández, el protagonista masculino de la novela. La protagonista femenina es Brisa Giulli, que se encontrará con este hombre que marcará su vida de alguna manera. Ella, entonces, tendrá que decidir si quedarse en este país convulsionado, con situaciones que son de vida o muerte.

Yo tomo antes de la Revolución, que era una vida distinta, llena de glamour, lujos y después, que cambió todo drásticamente y se convirtió en una vida llena de situaciones límites, muy convulsionada. Brisa va a tener que decidir si está dispuesta a perseguir la felicidad en un país en donde empieza a faltar la libertad. Además cuento qué llevó a la Revolución Cubana, incluso aparece el Che Guevara. Y ahí aparece Joel Fernández, un artista polifacético –escribe, pinta, es músico- que pertenece a una familia tabacalera que no apoya la Revolución.

-Mencionabas a Fangio y al Che Guevara. ¿Conocías sus historias? ¿Por qué te interesaron?

Sí, investigué muchísimo. Del Che Guevara no sabía tanto, tenía la idea de que se trataba de un líder, pero no entendía porqué no se había quedado en su país a hacer más cosas para Argentina. Encontré una persona con una vida apasionante: para él, el mundo era su hogar. En unas conversaciones que mantiene con mi personaje traté de plasmar esa personalidad.

En el caso de Fangio, traté sobre su secuestro que por suerte tuvo un final feliz pero por eso no fue menos intenso.

-¿Por qué elegís el género histórico – romántico?

Siempre me gustó mucho la historia: películas, novelas y todo lo que tenga que ver con la historia. Me gusta sumergirme en los personajes y la investigación. Aparte, me surge mi veta de abogada: pienso que tal o cual cosa tiene que cerrar; este cabo suelto no puede quedar así. Soy muy meticulosa y me gusta que hasta el último detalle sea verosímil.

-¿Te intere algún período en particular de la historia?

Me gusta toda la historia pero prefiero el siglo veinte, la época de la segunda guerra mundial porque cada día se vivía como si fuera el último. Eso da para explicar cosas, tomar decisiones y sumergir a los personajes en situaciones límites.

-¿Lo ves como una forma de acercar la historia a los lectores?

Sí, absolutamente. Hay mucha gente que me dice que le encantan mis libros porque aprenden. Me gusta contar esta parte humana de la historia; qué sentían las mujeres de antes, qué pensaba alguien que tenía que luchar en tal situación…

-Tus libros tienen temas en común: el amor, el destino, el encuentro, la felicidad. ¿Por qué te centrás en estas cuestiones?

Trato de ponerle a mis libros las cosas que tiene la vida y en las mismas proporciones. Mis libros tienen amor, erotismo, hijos. Hay temas que siempre están en la vida de una persona y tienen una proporción: no es todo amor, no es todo erotismo. Yo trato de cuidar esa proporción para que el lector se identifique.

-Florencia Bonelli y vos son las autoras más leídas del verano ¿eso genera presión?

Es impresionante. El otro día mi editor me escribió un mail en el que me decía que tenía un notición: vendí más que Florencia Bonelli. Eso es fantástico porque Florencia vende muchísimo…

Una vez me preguntaron qué tenía que tener un libro para ser bestseller y yo le contesté que debía ser lo más normal del mundo. Uno escribe cosas y la gente debe identificarse con eso, tiene que sentir que es parecido a lo que le pasa.

Me hace sentir bien porque puedo vivir de mi trabajo, pero además porque trato de que todos mis libros tengan una mirada positiva: no todo está perdido, existen las segundas oportunidades, el sol siempre vuelve a salir. Y por suerte, hay mucha gente que piensa así.

-¿Porqué le dedicás este libro especialmente a tu papá?

Mi padre escribió su primer libro a los veintitantos años y si bien yo lo leí, en ese momento era muy chica –tenía 12 años- y no lo entendí, me pareció muy aburrido. Cuando empecé a escribir “Los colores…” lo busqué por todos lados pero no lo encontré. El día que puse fin a mi novela, mi mamá me llama para decirme que había encontrado el libro en su casa. Ahí descubrí, muchos años después, que escribíamos sobre los mismos temas, que nos interesaban las mismas cosas.

Compartí poco con él como colega, apenas dos años porque enfermó y falleció. A veces, en el oficio surgen cosas interesantes para conversar con un colega y me encantaría poder hablarlas con él; nadie mejor que tu papá de esas cosas. Por eso se lo dediqué a él.

-¿Y con quién compartís esas inquietudes? ¿A quién consultás?

Córdoba tiene muchas escritoras así que cada tanto nos juntamos todas. Charlamos de cuánto cobramos por los libros, nos pasamos datos. Tenemos algunos barcitos donde nos juntamos siempre (risas). Nos hicimos muy amigas y creo que eso está muy bueno porque hay una nueva generación de escritoras, de camaradería.

-¿Habrá libro nuevo este año?

Seguramente, aunque este es un año especial: estoy escribiendo en la revista Para Ti y quiero hacer una obra de teatro musical en base a mis libros. La idea sería tomar distintas escenas de mis tres libros y hacer un gran musical. Ya estamos teniendo reuniones con gente que se especializa en eso.

-¿Te gustaría incursionar en el cine?

La novela nueva que quiero escribir me gustaría que fuera llevada al cine. Es una novela más corta, actual, que trate sobre los problemas sociales que tenemos en la Argentina, aunque por el momento no puedo adelantar mucho.