Pasan los años y cambian las estrategias, pero las moscas siguen en Los Pinos

Tres años atrás, 0223 daba cuenta de la historia contemporánea de Los Pinos, un pueblo del partido de Balcarce que vive afectado por las moscas. En ese entonces, el Concejo Deliberante del distrito serrano había aprobado la realización de un informe de investigación respecto a las causas de la plaga que desde hace años afecta al lugar.

Los Pinos, el pueblo de 150 personas eternamente invadido por las moscas

Tiempo después, con cambio de gobierno y de concejales, la historia sigue sin modificarse para pesar de las más de 200 personas que viven en el paraje rural, situado a la vera de la ruta 55, a unos 15 kilómetros al sur de la ciudad capital del distrito.

Preocupado por el tema, el director de Inspección General, Andrés Lombardini, se trasladó a la localidad para seguir avanzando en el plan que se instrumentó tiempo atrás, relacionado a una serie de fumigaciones y campañas de concientización. 

“Es una problemática histórica que se suscita en esta localidad, por eso desde mediados de año comenzamos a contactar a especialistas que nos den una mano para poder encontrar una solución de fondo”, contó el funcionario.

Hace unos pocos mesesvisitó Los Pinos la especialista del Conicet en “moscas rurales”, Laura Juan, quien durante dos jornadas estuvo tomando muestras y charlando con los vecinos para encontrar el origen de la presencia de ese vector. Asimismo, hace una semana pasó por el lugar el licenciado Fabián Díaz, encargado de Saneamiento Ambiental en Mar del Plata.

“En ambos casos, se produjo una coincidencia en el diagnóstico a través de la toma de muestras que da cuenta que se trata de una mosca doméstica en Los Pinos”, admitió Lombardini.

A partir de esos relevamientos, la comuna comenzó a desarrollar un plan teniendo como base el origen de las moscas y trazó algunas especificidades respecto a los planes de fumigación previstos que se intensificarán en los próximos días.

Además, según lo anunciado por Lombardini, se realizará un trabajo conjunto con la los vecinos para realizar cambios de hábitos que puedan generar mejores condiciones de higiene y desinfección. “Hay conductas cotidianas de los vecinos que pueden ayudar a prevenir la reproducción y estadío de la mosca en el lugar. Son cosas básicas como el uso de la lavandina o los desinfectantes. Pasa que a veces hay fórmulas que usan los vecinos que terminan siendo atrayentes de las moscas”, precisó el director de Inspección General.