Inauguran en Quequén la nueva guardia del hospital Irurzun

El intendente del partido de Necochea, Arturo Rojas, encabezó el acto de inauguración de la nueva guardia del hospital municipal “José Irurzun” de la localidad de Quequén, tras una inversión millonaria realziada para modernizar la atención gracias al esfuerzo conjunto entre el Estado y el sector privado.

Acompañado por la secretaria de Salud, el director del nosocomio y el titular de la empresa Nequén, entre otras autoridades, Rojas resaltó que esta obra acompaña a lo planificado desde su gestión, bregando por “tener un sistema que sea cada vez más cercano a los vecinos y que bride mayor servicio”.

La nueva guardia cuenta con un consultorio de atención de urgencias, equipado con provisión de oxígeno, aspiración, aire comprimido y un carro de paro completo, con desfibrilador, electrocardiógrafo y monitor multiparamétrico; baño de discapacitados y urgencias completo; un shock room con dos camas de internación, también provistas con oxígeno, aspiración y aire comprimido, respirador, monitores multiparamétricos y bombas de infusión; un ofice para el personal con baño privado; consultorio de enfermería con oxígeno y aspiración; un garaje para ambulancias; y comunicación directa con la sala de internación médica.

Antes de cortar las cintas y presentar el nuevo espacio en sociedad, el jefe comunal le agradeció a Nequén por la inversión y a los trabajadores de la salud por su tarea: “Sin ese plus que le van a poner ustedes a la atención esto no es más que un edificio”, reparó el mandatario.

Por su parte Ruth Kalle, secretaria de Salud de la comuna, resaltó la promesa de mejorar el lugar realizada por la gestión de Rojas tiempos atrás: “Antes de asumir dijimos que al hospital Irurzun había que ponerlo en valor y a mí me da orgullo saber que esto no fueron solo palabras ni una cuestión de campaña”.

Finalmente el director del nosocomio, Nicolás Salguero, también uno de los principales impulsores del proyecto, remarcó en su discurso: “No podemos dejar de expresar la alegría que tenemos. Cuando arrancamos la Guardia era un área irreparable, estaba totalmente abandonada y en estado deplorable”.