Cierre de Garbarino: "Hay gente que ya se considera despedida porque el ahogo económico es absoluto"

Dirigentes marplatenses del Sindicato de Empleados de Comercio reconocieron que "probablemente" se va a agudizar el conflicto por el cierre de Garbarino, que motiva desde principios de mes una toma por parte de los trabajadores en las sucursales que quedan de la empresa en la ciudad, y lamentaron el "abandono" que generó en la casa que supo ser líder en venta de electrodomésticos Carlos Rosales, el dirigente de San Lorenzo que se convirtió en su dueño en 2020.

Si bien no se esperan mayores novedades, la negociación por el futuro de la firma sigue en una audiencia prevista para este miércoles en el Ministerio de Trabajo: allí se debe definir, al menos, cómo se cancelarán las importantes deudas que se arrastran con el personal. "La verdad que no hay demasiada expectativa para el próximo encuentro porque cada vez que se reúnen mienten; hacen promesas y no las cumplen", reconoció Dario Zunda, secretario gremial de la organización.

"Es un momento muy difícil. Nosotros seguimos con la toma de la sucursal del centro y eso no va a cambiar hasta la semana que viene. Y es probable que la problemática se agudice con el correr del tiempo dada la situación de abandono que ha producido este señor (NdR: en referencia a Rosales) sobre 4300 familias en todo el país que necesitan cobrar sus salarios para cubrir sus necesidades. Ya hay más de 90 días de incumplimientos", señaló el dirigente.

Una de las esperanzas es que pronto se liberen en Capital Federal los fondos que la Administración Federal de Ingresos Públicos (Afip) le había retenido a Garbarino en concepto de ingresos brutos. "Ese dinero iría a parar directamente a la cuenta sueldo de los trabajadores pero la realidad es que esos montos retenidos todavía no se han hecho efectivos y da la impresión que está lejos de que esto pueda concretarse", lamentó el gremialista.

Zunda aseguró que desde que Rosales compró la empresa "lo único que hizo fue trasladarle la crisis a los propios trabajadores". "Los está ahogando mes a mes. Rosales tiene muy pocos escrúpulos. Hay un ataque abierto a los trabajadores. Cuando los números no son los que ellos quieren, incrementan sistemáticamente la virulencia en las políticas de abandono", aseveró, y apuntó: "Este señor no hizo una sola cosa bien desde que compro la empresa. Los ánimos se van a ir exacerbando, la gente se pone muy nerviosa y nosotros no vamos a cambiar la actitud respecto de lo que sucede porque esta gente no es seria".

En declaraciones a 0223, el secretario gremial del sindicato recordó que los 34 trabajadores que hay en Mar del Plata acusan deudas de aproximadamente 300 mil pesos en concepto de salarios, aguinaldos, y aportes. "Hay gente que ya se ha considerado despedida porque el ahogo económico es absoluto y hay que salir a buscar trabajo. De algo hay que comer", expresó, y expresó su intención de que la sucursal se pueda abrir para retomar la venta y permitir cancelar los montos adeudados con el personal.

El referente del gremio recordó que "hay mucha mercadería" en los depósitos de Garbarino que pertenece a la propia empresa. "Ellos lo niegan sistemáticamente pero es así. Hay mercadería de proveedores que se ha dado a consignación pero también hay un abandono absoluto porque cortaron la cadena de comercialización con pretextos y mentiras; nosotros queremos que esto se abra y se empiece a vender para ver si se genera alguna rueda de venta", planteó, y concluyó: "Es muy triste este permanente golpeo hacia los empleados porque lo único que quieren es que vuelva a abrir Garbarino para vender y cobrar sus salarios atrasados".