Elecciones 2023: sin cancha definida, sólo se ve barro

Las discusiones electorales se aceleraron en medio de la crisis del gobierno. También crecen los rumores de nombres, rupturas y desdoblamiento. ¿Qué hay en concreto?

La elección 2023 por ahora tiene toda la cancha embarrada.

20 de Abril de 2022 20:59

“No hay cancha”, asegura un importante dirigente provincial de la oposición. La única certeza de cara a las elecciones 2023 es que habrá competencia. De ahí en más todo es incertidumbre: la cancha, la pelota y hasta la fecha.

Las últimas semanas, con un incremento en la tensión entre Alberto Fernández y Cristina Kirchner, todo fueron rumores. Se habló desde la convocatoria a la Asamblea Legislativa para reemplazar al presidente hasta el desdoblamiento de las elecciones nacionales y provinciales –un tema que no es nuevo, pero encontró eco en estos tiempos movidos-. Entre medio, hubo un sinfín de versiones sobre rupturas –de un lado y de otro-, alianzas inesperadas y candidaturas.

La crisis política que atraviesa el gobierno de Alberto Fernández hace que el clima electoral se acelere. “Parece que estuviéramos en abril de 2023, no en abril de 2022. Falta más de un año para definir quién será candidato”, dice un hombre de peso en el Pro, quien remarca que esto altera cualquier tipo de plan que se intente trazar. Y un hombre del radicalismo recuerda que en los últimos 20 años todos aquellos que se posicionaban para ganar elecciones quedaban en el camino: “El que entra Papa sale cardenal”, grafica.

Uno de los temas que se instaló en los últimos tiempos es la posibilidad de un desdoblamiento de la elección de la provincia de Buenos Aires con la presidencial. ¿Hay posibilidades de que ocurra? En el escenario actual nadie se atreve a descartar absolutamente ningún escenario. En el Frente de Todos, sin embargo, creen que es una posibilidad remota. Al menos hoy. “No está en la agenda. No hay discusiones sobre este tema”, confirman dos legisladores provinciales del FdT con acceso a las mesas de decisión.

El presidente del comité provincia de la Unión Cívica Radical y jefe de la bancada de Juntos en la Cámara de Diputados de la provincia, Maximiliano Abad, dejó abierta la puerta para discutir la idea de separar la elección del gobernador con la del presidente. “Los bonaerenses nos merecemos una discusión sobre el tema del desdoblamiento. Una discusión que nos permita poner sobre la mesa los temas provinciales. Lo que sucede es que en la elección unificada los gobernadores o candidatos, se esconden detrás de la figura y la discusión presidencial”, planteó. Puso como ejemplo a provincias como Mendoza y Córdoba o la misma Ciudad de Buenos Aires.

Montenegro y Abad son socios políticos.

 

El planteo de Abad fue leído por algunos sectores como un impulso a esta idea. Desde el entorno del legislador marplatense decidieron bajarle el tono a esa idea. “No queremos cerrar la puerta, estamos dispuestos al debate. Creemos que va a fortalecer la figura del candidato a gobernador si se elige desacoplado del presidente. Pero no son proyectos nuestros”, señalan.

Pero la gran pregunta que impulsa –o descarta- esta posibilidad es clara: ¿a quién le sirve? Ni el Frente de Todos, ni Juntos tienen los votos necesarios para aprobar en la Legislatura la reforma necesaria. Por ende, para poder avanzar en la posibilidad deben avanzar en un acuerdo conjunto. En algún momento, se mencionó a Máximo Kirchner como ideólogo del plan, con el objetivo de despegar la elección bonaerense de la mala administración de Alberto Fernández y así evitar que un posible voto castigo por la situación económica afecte al candidato a gobernador.

La idea guarda lógica. Sin embargo, desde el kirchnerismo más duro explican por qué creen que el plan no está en agenda y tampoco es conveniente. La tensión entre el presidente y la vice es inocultable. Nadie intenta disimularla, pero sí consideran que ninguna de las partes busca una ruptura. “La tensión se estabilizó en un nivel alto. Parece que no va a cambiar demasiado: no va a bajar y tampoco va a explotar”, analizan.

Darle impulso al desdoblamiento significaría tensar aún más la cuerda con Alberto y por el momento no buscan eso. También advierten que el desdoblamiento podría perjudicar al Frente de Todos en lo electoral. ¿Cómo? “Despegarse de Alberto podría servir. Pero si Cristina, que es la que tracciona votos en el conurbano, va de candidata a senadora en una elección desdoblada no estaría en la lista”, dice un legislador provincial y suma: “Y no te olvides que muchos también quieren que vaya como presidenta”. La expectativa se basa en un reciente sondeo de Ricardo Rouvier que muestra que CFK es la que mayor intención de voto tiene en el espacio oficialista, aunque su figura también cosecha un alto nivel de rechazos.

Rouvier analizó los candidatos con más intención de voto.

 

En Juntos, en tanto, hay algunos que creen que podría beneficiarlos la separación de las elecciones. De hecho, es el exministro de Gobierno de María Eugenia Vidal, Joaquín De la Torre, el que está trabajando en la elaboración de un proyecto. Sin embargo, saben que sin acuerdo con el Frente de Todos será imposible avanzar.

El que sigue con expectativa esas versiones es Javier Milei. La figura del economista creció fuertemente en las últimas semanas y reúne una intención de voto que ya comienza a preocupar a sus rivales, especialmente a los de Juntos. La gran mayoría de los votos de Milei salen de un potencial electorado de Juntos. Por eso, no sorprende el endurecimiento en el discurso de muchos dirigentes de Juntos, que estaban caracterizados por la moderación, entre ellos el intendente de Mar del Plata, Guillermo Montenegro. “Se quieren apropiar del discurso de Milei y que cuando llegue la elección poder decirle a esos votantes: ‘Tenemos un discurso muy parecido, pero nosotros podemos ganarle al kirchnerismo y él no’”, plantea un dirigente radical.

Sin embargo, la gran debilidad de Milei es que no tiene estructura y todo se construye alrededor de su figura. “Hasta ahora no hay candidato a gobernador. Si la elección se divide, en la provincia vamos a estar muy complicados”, admiten desde el espacio.   

 

Danza de nombres

Además de la incertidumbre del desdoblamiento o no, hay más factores que suman incógnitas a la estrategia de cada espacio político. El principal son los nombres que competirán. En Juntos la interna es fuerte. El Pro no descarta ir con dos alternativas presidenciales (Horacio Rodríguez Larreta y Patricia Bullrich son los que más suenan) y algunos no descartan a Maurcio Macri, aunque las versiones más fuertes indican que buscará consolidarse como arquitecto del espacio. La doble candidatura podría beneficiar al radicalismo que buscará aprovechar la división de ese voto para ganar una interna. La UCR también maneja varias posibilidades. Este martes, el marplatense Maxi Abad fue anfitrión en una cena de varios de ellos: Facundo Manes (su gran apuesta), Gerardo Moreales, Gustavo Cornejo y Gustavo Valdés ya deslizaron su voluntad de competir.

 

Sin embargo, hay una diferencia clave entre la situación de la UCR y el Pro: en el partido centenario ya acordaron que al final de la carrera se presentará el mejor candidato y el resto lo apoyará. “Creemos que en el Pro va a terminar pasando lo mismo. Si ven que por ir divididos pueden perder de algún modo se ordenarán”, dicen desde la UCR.

En el FdT las dudas son todavía mayores. Alberto Fernández ya deslizó su voluntad de competir, pero lo hizo más como una necesidad de mostrarse vivo que la convicción real de que puede, otra vez, encabezar la fórmula de la coalición. Nadie se imagina a un presidente enfrentando una Paso y más si tiene chances concretas de perder. Pero si no es él tampoco está claro quién o quiénes pueden competir. Los problemas de la gestión son suficientemente importantes como para empezar a lanzar candidatos a la cancha.

 

¿Y en Mar del Plata?

Con todas estas incertidumbres, el panorama en Mar del Plata es por demás incierto. No tanto por los nombres: todo indica que Guillermo Montenegro y Fernanda Raverta serán las principales opciones electorales el año próximo. Pero, por ejemplo, no está claro si tendrán competencia interna. Raverta ya avisó que está dispuesta a competir con cualquiera e invitó, por caso a Gustavo Pulti a trabajar dentro de la coalición para hacer una gran interna el año próximo.

Montenegro, en cambio, evitó la competencia el año pasado, pese a la interna entre la UCR y el PRO en muchos distritos y en los tramos altos de la lista. El propio Abad, principal socio político del intendente de Mar del Plata, ya avisó que buscarán tener candidatos en todos los distritos, aunque no precisó qué pasará en Mar del Plata. “Lo veremos cuando llegue el momento. Todavía es muy pronto para tomar esas definiciones”, avisan cerca del legislador.

Kicillof participó de la presentación que realizó Aerolíneas Argentinas en Mar del Plata.

 

Mientras se define la cancha y los jugadores, algunos pelotazos llegan a la cancha. Axel Kicillof llegó a Mar del Plata en las últimas horas para participar de la asunción de autoridades de la UOM en el hotel 13 de Julio. También improvisó una participación en la actividad que organizó Ariel Ciano junto al presidente de Aerolíneas, Pablo Ceriani, en el Torreón del Monje. Allí, el mandatario provincial les apuntó a los intendentes del Pro que cuestionan las medidas del gobierno contra la inflación. Les pidió que “ayuden” a cuidar el bolsillo de la gente. “Basta de bla bla”, remató.

 

Montenegro, que había culpado a la “maquinita” por la inflación, este miércoles volvió a cargar contra el FdT tras el proyecto de Paco Durañona que busca darle poder de policía a los intendentes y que puedan clausurar comercios que no respeten los acuerdos de precios. “El gobierno del Frente de Todos quiere que los intendentes se pongan a controlar lo que ellos no pueden. El problema de la inflación es otro. Hay que usar los recursos de manera eficiente y dejar de darle a la maquinita”, retrucó.

La tensión no afloja y parece no haber lugar para una tregua entre los dos espacios mayoritarios en la Argentina. Y Mar del Plata no es la excepción. Así, en la cancha que todavía no se terminó de armar sólo se ve barro.