Ushuaia: un perro rescató a un esquiador que quedó enterrado bajo la nieve tras una avalancha

"Tango", el canino entrenado para este tipo de emergencias, señaló a los rescatistas donde estaba el joven que estuvo más de una hora desaparecido.

Tango, el perro rescatista, junto a Julián Elizari, su cuidador. (Foto: Télam)

11 de Julio de 2022 11:09

Por Redacción 0223

PARA 0223

Tango, un perro labrador de 10 años, se convirtió en héroe tras rescatar a un esquiador que quedó atrapado bajo la nieve tras una avalancha. El hecho ocurrió en un cerro de la ciudad de Ushuaia.

El hombre estuvo desaparecido durante más de una hora el pasado sábado. Tras una búsqueda intensa, el perro, entrenado para este tipo de circunstancias, marcó el lugar donde estaba enterrado el joven y posibilitó que lo encontraran con vida.

Cerca de las 2 de la madrugada de este domingo, personal médico del Hospital Regional Ushuaia informó que el esquiador “se recupera y se encuentra estable, con parámetros normales e internado en observación”.

El incidente ocurrió el pasado sábado por la noche, en el Glaciar Martial. En ese momento un gran desprendimiento de nieve se deslizó montaña abajo y sorprendió a dos jóvenes que practicaban esquí de travesía.

Tango se convirtió en un héroe (Foto: Télam)


Uno de los esquiadores chocó contra una piedra y sufrió golpes en sus rodillas, pero logró eludir la avalancha y pedir ayuda. Su compañero, desafortunadamente, quedó atrapado bajo la nieve. 

Tras el pedido de auxilio de uno de los jóvenes, integrantes de la Comisión de Auxilio de Ushuaia activaron inmediatamente el protocolo de rescate y dispuso un operativo de rescate en la zona. 

”Estábamos en medio de una cena. Yo siempre tengo la mochila preparada. La familia ya sabe. Uno te pasa el pantalón de invierno, otro las linternas. Tango se pone a saltar porque para él es un juego”, relató a Télam el cabo primero del Cuartel de Bomberos “2 de abril”, Julián Elizari, que estaba acompañado del perro entrenado para este tipo de emergencias.

”Cuando el muchacho que pidió auxilio me marcó el lugar, Tango empezó a hacer su trabajo. Recorrió unos 10 metros y empezó a ladrar y a rascar la nieve. Lo había encontrado”, comentó el bombero de 57 años. 

”Empezamos a escarbar con cuidado, con palas y con las manos. Hasta Tango ayudó. La nieve estaba muy compacta y húmeda. De repente encontramos una mano. Estaba quieta y temimos lo peor”, continuó el rescatista.

 


Afortunadamente, la historia tuvo un final feliz. Los rescatistas notaron que los dedos de las manos se estaban moviendo, por lo que rápidamente comenzaron a sacar al sujeto de allí y lo trasladaron a un centro médico.

”La verdad es que no sé cómo sobrevivió. Fácilmente estuvo más de una hora enterrado hasta que lo encontró Tango. No había una burbuja de aire con el exterior y calculo que la nieve que tenía encima pesaba unos 200 kilos”, rememoró Elizari.