Bomba en el Don Bosco: el fiscal pidió la entrega de los elementos recuperados tras la explosión
Alejandro Pelegrinelli solicitó imágenes de cámaras de seguridad y listado de llamadas del día en que se produjo la fatídica bomba que provocó que una alumna de 15 años perdiera más del 95% de la audición en ambos oídos.
Por Redacción 0223
PARA 0223
Apenas unas horas después de recibir la causa por las heridas gravísimas que sufrió una adolescente del Instituto Don Bosco tras la explosión de un artefacto casero en un cesto de basura, el fiscal Alejandro Pelegrinelli solicitó al establecimiento la entrega de los elementos que dijeron haber secuestrado tras el hecho.
El titular de la Unidad Funcional de Instrucción N°5 también solicitó la entrega, si hubiera, de cámaras de seguridad del establecimiento y de llamados al 911. Sin embargo, tal como adelantó 0223, esa jornada no se hicieron llamados a la Central de Emergencias ni a la comisaría cuarta con jurisdicción en la zona.
La causa por la explosión que le provocó lesiones gravísimas a Azul Zabaleta fue calificada por la fiscalia de Delitos Culposos como estrago doloso, lesiones y omisión de auxilio.
El caso
Azul Zabaleta, alumna de cuarto año del secundario del Instituto Don Bosco, salió al último recreo del viernes 8 de julio a las 12 del mediodía, con la felicidad de saber que llegaba el fin de semana. Hasta que al pasar al lado de un cesto de basura, un explosivo de fabricación casera estalló y la desvaneció ante la mirada incrédula de compañeros, profesores y autoridades.
Luego de un mes de diversos tratamientos, se confirmó el pasado viernes que la adolescente sufrió la pérdida del 96.4 % de su audición, y que deberá someterse a una operación para colocarle unos implantes coclares, cuyo valor van desde los 40 mil a 60 mil dólares. Además, no podrá practicar nunca más deportes de contacto: deberá abandonar el rugby y el karate, disciplinas que formaban parte de su rutina diaria.
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