Acusados de robos millonarios a departamentos se negaron a declarar 

Facundo Carro y Agustín Suárez no quisieron dar su versión de los hechos. Serán trasladados a la Unidad Penal 44 de Batán.

3 de Febrero de 2023 13:33

Por Redacción 0223

PARA 0223

Dos de los cuatro prófugos acusados de integrar la banda que cometió cuatro robos en departamentos en los que obtuvieron un monto superior al millón de dólares y 42 millones de pesos se negaron a declarar hace instantes ante el fiscal Fernando Berlingeri y fueron trasladados nuevamente a la alcaidía penitenciaria de Batán. 

Tal como adelantó en su momento 0223, los dos sujetos que se entregaron ayer en la sede de la DDI estuvieron acompañados por el abogado Lautaro Resúa. Tras escuchar los cargos en su contra en el octavo piso de Tribunales, se negaron a dar su versión de los hechos.

Otro de los prófugos podría entregarse en las próximas horas y tendría intenciones de prestar declaración. Para el profesional que los representa, no hay elementos que permitan confirmar que se está en presencia de una asociación ilícita y, en el caso particular de Mauricio Di Norcia, tampoco hay elementos que lo relacionen con la causa.

El cuarto de los imputados por el fiscal Fernando Berlingeri es Ricardo Soteris, pero no trascendió que decisión tomará tras evitar ser detenido durante los allanamientos que se hicieron el miércoles por parte de la DDI.

Los dos que permanecen prófugos son quienes habían viajado juntos al Mundial de fútbol de Qatar y conocían a Carro y Suárez, con quienes mantienen una vieja amistad.

La operatoria 

El primer hecho que se le imputa a la banda es el registrado el 28 de julio pasado en un séptimo piso del edificio ubicado en Moreno, entre Catamarca y La Rioja, donde vive un hombre de 87 años. Además de una suma cercana a los 150 mil dólares, los delincuentes se llevaron dos armas de fuego, alhajas, dos iPad, dos iPhone 12, prendas de vestir y un reloj Rolex de mujer. 

El segundo hecho se registró en el mismo edificio, un piso más abajo, apenas cuatro días después. En el inmueble, propiedad de una mujer de 85 años, hallaron una suma importante en dólares, pesos, alhajas, relojes de oro, celulares, cámaras y otros elementos. 

La banda, que ya había comenzado a realizar algunos gastos, volvió a actuar el 13 de noviembre pasado en un edificio ubicado a seis cuadras del anterior, sobre calle Bolívar. Luego de distintas tareas de inteligencia ingresaron al inmueble del que escaparon con más de un cuarto de millón de dólares y cerca de 150 mil pesos.

Según la investigación de la DDI, el último hecho atribuido al grupo sucedió el 20 de enero de este año en un departamento de Playa Grande del que sustrajeron dos valijas de viaje y una caja fuerte con dinero. 

Múltiples tareas, roles variados 

La labor de la DDI con el análisis de cámaras públicas y privadas a partir de un primer reconocimiento que hizo un allegado a las víctimas, perfiles en redes sociales, el  impacto de antenas con geolocalización, seguimientos, filmaciones y escuchas telefónicas permitió establecer no solamente el rol de cada uno de los cuatro imputados, sino también la relación que tenían con otras personas para algunas de las tareas previas y posteriores.

Se pudo establecer que la banda usaba inhibidores de alarmas para tener acceso a los autos y que tenían contacto con un par de cerrajerías para la copia de llaves. “Del mismo modo se identificaron una ‘cueva’ donde hacían el cambio de moneda extranjera en el barrio Bernardino Rivadavia y una joyería en el microcentro para reducir el botín”, señalaron fuentes cercanas al expediente. 

Para los investigadores, el líder de la banda definía el diagrama de robos a partir de los datos de las víctimas potenciales que aportaba otro de los miembros. “El resto de las tareas de ingreso, ‘campana’ duplicación de llaves y uso de inhibidores para acceder a los autos, podía modificarse”, agregaron.