El oficialismo presentó un proyecto para potenciar la disposición y recolección separada de residuos

Avanzar en un sistema integral para la separación de residuos en origen es una de las grandes tareas pendientes en General Pueyrredon, el séptimo distrito más poblado del país, según el Censo 2022. Si bien se han realizado intentos para implementar la disposición y recolección separada de los residuos solidos urbanos, los mismos han quedado a medio camino por diversos motivos.

Ahora, un proyecto del radicalismo busca recuperar y profundizar esa perspectiva, con modificaciones relevantes a la Ordenanza 23.486 que establece las reglas en el ámbito municipal para la generación, manipulación, operación, transporte, tratamiento y disposición final de los Residuos Sólidos Urbanos (RSU) y asimilables.

Dicha normativa, sancionada en 2017, establece un sistema de recolección separada de forma genérica, pero ahora la propuesta de modificación piensa avanzar con mayores especificaciones. “Para un adecuado funcionamiento y observancia de dichas obligaciones es preciso que las normas sean completas, claras y positivas, permitiendo a la ciudadanía y a quienes se encuentren alcanzados por la ordenanza una adecuada interpretación y cumplimiento”, se expuso en la iniciativa impulsada por el concejal Daniel Núñez.

La más relevante es que se establece que los martes y viernes los vecinos deberán sacar a la vía pública los residuos recuperables, “preferentemente” en bolsas verdes, mismos días en que serán recolectados por la empresa que brinda el servicio en General Pueyrredon. De acuerdo al proyecto, dentro de este tipo de residuos se incluyen papel, cartón, vidrio, plástico y metal.

En tanto, el resto de los días quedarán reservados para los residuos no recuperables, que deberán ser dispuestos en bolsas negras. En la modificación propuesta al Artículo 10º se detalla que dentro de este grupo se considera a los restos de comida, papeles, cartones mojados y/o sucios, envases plásticos con restos de comida, servilletas, papel tissue, papel higiénico y todo otro residuo sólido urbano y asimilable que no se incluya en la categoría anterior.

Un esquema similar había anunciado el gobierno municipal en junio de 2020, en el marco del Día Mundial del Medio Ambiente, luego del abandono de la disposición durante la gestión de Carlos Arroyo. Los resultados, sin embargo, no fueron los óptimos.

Para potenciarlo, en caso de ser aprobados los cambios planteados a la ordenanza, el gobierno fijará un cronograma temporal y progresivo, con metas interinas y finales para lograr una aplicación efectiva de lo dispuesto. Además, se avanzará con las multas previstas en el Código Contravencional para quienes incumplan, una nueva incorporación planteada en el proyecto, ya que la ordenanza vigente solo establece que las infracciones serán consideradas “faltas graves”.