Un motochorro le dio un balazo, pero igual lo corrió y lo detuvo a golpes: el ladrón era un policía

El ladrón le apuntó con un arma a un hombre para robarle el celular, y un testigo que vio todo lo persiguió pese a recibir un disparo y logró atraparlo. Cuando llegaron los policías, descubrieron que era uno de sus compañeros.

6 de Junio de 2023 09:40

Por Redacción 0223

PARA 0223

Un nuevo hecho de inseguridad, con un motochorro como protagonista, terminó en una detención ciudadana. Pero esta vez el final de la historia tuvo un giro inesperado y muy preocupante: el delincuente detenido a golpes por un vecino era un policía que en sus ratos libres se dedicaba a robar. Sus colegas lo llevaron sin poder creer lo que había hecho.

El increíble hecho ocurrió este domingo por la tarde en pleno centro de la ciudad de San Miguel de Tucumán, donde un grupo de personas persiguió y capturó a un motochorro que le había robado el celular a un vecino y descubrió que era policía.

El robo fue en la puerta de un lavadero, cuando la víctima del asalto esperaba a que le entregaran su auto. Fue en ese momento que apareció el delincuente a bordo de una moto, lo encerró y lo amenazó con un arma: “Dame el celular o te quemo”, le dijo.

Aunque el hombre intentó resistirse al asalto, al ver que el ladrón tenía un arma decidió darle su celular. Pero el robo no terminó allí. Es que mientras el delincuente corría hacia su moto para escapar, un grupo de vecinas que había visto el asalto comenzó a pedir ayuda a los gritos, y fue por eso que en apenas unos segundos varios vecinos concurrieron a tratar de perseguir al ladrón.

Acorralado, el delincuente apuntó contra el grupo de personas que lo seguía y disparó dos veces. Uno de los balazos alcanzó a uno de los perseguidores que, a pesar de estar herido en el tórax, logró saltar sobre él y tirarlo de la moto.

Las imágenes de la captura del motochorro, muy golpeado, fueron publicadas en las redes sociales por el periodista local César Juarez. En las fotos se ve al delincuente ensangrentado en el piso tras ser reducido a golpes por los vecinos y, a metros de distancia, el arma que usó para cometer el robo.

Cuando minutos después llegó la Policía, al identificar al delincuente los uniformados comprobaron que se trataba de un compañero de su propia fuerza que en sus horas de franco salía a robar.