Morena Rial, involucrada en ritos Umbanda y amarres: "Cada uno tiene la religión que se le canta"

Mientras Jorge Rial y Luis Ventura se enfrentan en tribunales y en las redes por ella, Morena Rial protagoniza un nuevo escándalo. Ahora fue el blanco de una dura acusación: una ex amiga aseguró que la joven participa en ritos Umbanda y frecuenta a brujos a los que les habría encomendado "trabajos" para quedarse con la fortuna de su padre y para volver con su ex novio.

“Yo la acompañé en Buenos Aires y en Córdoba. Ella va a villas, entra y empieza a preguntar si conocen a brujos y umbandas. Ella se quería quedar con todo (lo de Rial)”, aseguró Melina Granado, que también fue niñera de Francesco Benicio, el hijo que la mediática tuvo con Facundo Ambrosioni en 2019.

En un testimonio que brindó este miércoles en LAM, la mujer también aseguró que Morena intentó retener a su última pareja, apodado "El Maxi", a través de un "amarre". “Ella va a lo bueno y a lo malo... Pide cosas por ella y por otras personas para lo malo. Ella iba a pedir más que nada por su expareja Maxi, quería amarrarlo, pedirle que volviera”,dijo sobre la polémica hija de Jorge Rial, que es una confesa devota de San La Muerte.

Morena Rial se defendió de las críticas

Tras la repercusión que tuvo la entrevista a Granado, la mediática hizo un fuerte descargo en su cuenta de Instagram, donde tiene 1.3 millones de seguidores. A través de varias historias y con un filtro de florcitas sobre su cara, Morena Rial no se achicó y, fiel a su estilo, apuntó contra el programa de televisión que difundió la noticia, sus panelitas y su ex amiga.

“Voy a pasar por acá para explicarles aunque en realidad no debería explicarles un carajo. Lo que hago con mi vida es un problema mío. Después... a las negritas que quieren dos minutos de fama, me chupa dos huevos lo que puedan llegar a decir”, arrancó diciendo en referencia a Granado.

Luego, lanzó un fuerte comentario contra las panelistas que integran el ciclo que conduce Ángel De Brito por América TV: “La gente que se sienta y se pone a hablar de mí: ¿por qué no cuentan sus experiencias? ¿Por qué no cuentan las cosas que les hacían a las amantes de sus maridos?".

"¿Por qué me juzgan a mí? Cada uno tiene la religión que se le canta. Yo no juzgo a una persona que va a una iglesia evangelista, no juzgo a una persona que va a una iglesia cristiana”, siguió diciendo, en referencia a sus preferencias por San La Muerte y los ritos umbandas. 

Siguiendo el estilo de su padre, también amenazó a las panelistas con la posibilidad de exponer cuestiones de su vida privada: “Si no quieren que salga a contar todas las cosas que sé, como por ejemplo con quién se acostaban y quiénes lo cuernean, fíjense un poquito en sus vidas. Se ve que no tienen otro tema de conversación para sacar”.

Horas más tarde, publicó nuevas historias en su cuenta. "Lo que yo hago con mi vida es un problema mío", dijo contundente. "Me trataron de patotera, chicos. Patotera no. Yo me defiendo, no soy ninguna estúpida. No soy ninguna tonta para que una cachivache me venga a mí a tratar mal", se defendió.

Por último, desmintió los dichos de Granado sobre el supuesto "amarre" que le habría hecho a su ex novio. "Mi ex ya se murió el año pasado para mí. No entiendo en qué cabeza cabría que yo siga hablando de mi ex", cerró.