Violación en la cárcel: estaba acusado de violencia de género, se autopercibió mujer y embarazó a otra presa

Córdoba quedó conmocionado con un caso de múltiples vertientes. Gabriel Fernández comenzó con sus problemas judiciales en 2016. Sus parejas lo acusaron de maltrato y violencia de género. Por tal motivo, fue juzgado tras su detención.

Pero en 2018, se autopercibió mujer y empezó una nueva historia llamándose Gabriela Fernández. El Servicio Penitenciario la trasladó al área de mujeres ya que había cambiado de identidad de género. Sin embargo, al año siguiente, estalló un nuevo conflicto con denuncia en su contra: quedó acusada por un delito contra una mujer, lo condenaron por privación ilegítima de la libertad, lesiones leves y amenazas. A los pocos días, quedó en libertad.

Ya en 2023 y fuera de prisión, Gabriela fue denunciada por desobediencia ya que había intentado tomar contacto con su víctima, cuando existía una perimetral para no hablar con ella. Entonces, la detuvieron otra vez.

De vuelta en la cárcel, Gabriela denunció violencia institucional en su contra. Pero el 17 de julio pasado la justicia fue notificada del abuso sexual sufrido por una interna, quien habría quedado embarazada. Ambas estaban alojadas en el anexo Sala A del Establecimiento Penitenciario 3. Tras la acumulación de sanciones disciplinarias, Gabriela Fernández fue trasladada.

Cómo siguen las causas de la imputada

La Fiscalía Especializada en Violencia de Género y Familiar del Segundo Turno de Córdoba pidió llevar a juicio a la acusada por una de las causas. No obstante, la defensa oficial, presentó la oposición sosteniendo que no podía aplicarle esa figura por su condición de mujer y que la manera que se llevó adelante la investigación reproducían un trato discriminatorio.

La jueza rechazó el planteo y decidió avanzar con el juicio. “No puede prosperar la hipótesis defensiva que postula que no se encuentra justificada la injerencia en la vida privada de Fernández”.

Entre discusiones sobre los derechos y la perspectiva de género con la que se considera a la acusada, la causa quedó empantanada y espera avances en los próximos días. No sin antes tomar una decisión clave: cómo se posiciona la Justicia para defender los derechos constitucionales.