El gobierno denunció penalmente por "intimidación" a municipales que habrían impedido un control de personal

El gobierno de Guillermo Montenegro presentó una denuncia penal por las presuntas intimidaciones que habrían sufrido agentes que realizaban el miércoles un operativo de control en la Dirección de Tránsito, en el marco de la retención de tareas dispuesta por el Sindicato de Trabajadores Municipales, como así también por un segundo hecho el jueves en el Palacio Municipal y una aparente amenaza a una empleada del área para que se sume a la medida de fuerza.

La presentación judicial, adelantada por fuentes comunales a 0223, tiene como sustento una denuncia interna que presentaron cuatro agentes del área de Control de Personal ante el subsecretario de Control de Gestión, Adrián Barroso, dando su versión sobre los acontecimientos ocurridos el miércoles pasadas las 11 en la Dirección de Tránsito de 20 de Septiembre y España y el jueves en la oficina que el área tiene en el Palacio Municipal.

La denuncia fue presentada ante Fiscalía este viernes por el secretario de Legal, Técnica y Hacienda, Mauro Martinelli, y la directora General de Personal, Lynette Hooft. Allí se asegura que "tanto empleados mujeres como hombres, fueron insultados y abucheados por querer controlar y debieron retirarse del lugar sin poder, en algunos casos, corroborar la información de modo fehaciente. La intimidación sufrida fue de tal magnitud que, a posteriori, manifestaron expresamente un pedido para que no se les asigne más esa labor pues sentían inseguridad".

"Todo lo expuesto, podría constituir delitos de intimidación sin perjuicio de la calificación legal que la Fiscalía entienda corresponde a los hechos supra descriptos, teniendo en consideración que siempre deben respetarse los derechos y garantías de todas las personas que desempeñan sus tareas habituales en un ámbito laboral de respeto recíproco y libre de intimidaciones y amedrentamientos", añadió la Comuna.

En la denuncia del gobierno se adjuntó la nota interna firmada por cuatro agentes -donde no se aclara su identidad- y detalla lo ocurrido cuando el grupo de control -encabezado por el propio Barroso- se presentó en la Dirección de Tránsito para relevar el acatamiento que tenía la retención de tareas dispuesta por el STM, en el marco de los reclamos por falta de convocatoria a paritarias.

Según se afirma en la denuncia interna, el jefe del área se negó a entregar una lista con los agentes que formaban parte de la medida, donde los empleados también se negaron a identificarse, además que del reloj mecánico donde se toma asistencia habían sido retiradas las fichas del turno mañana.

Siempre de acuerdo al contenido del documento, una agente -a la que tampoco se identifica- declaró haberse adherido a la retención de tareas presuntas amenazas recibidas. “Nos comenta que tomó esta decisión por amenazas de sus compañeros”, se aseguró en el reporte, sin mayores detalles al respecto.

Tras dicho episodio, se apuntó que se suscitaron las primeras intimidaciones hacia el personal de control. “El personal de la dependencia comenzó a realizar el denominada ´ruidazo´ en la vía pública e inmediatamente ingresaron al estacionamiento del lugar para expulsar con agresiones verbales al personal de control, exclamando improperios al grito de ´¡Fuera, fuera!´ y ¡No vuelvan más acá´”, por lo que no se pudo finalizar el relevamiento. En el vídeo que se dio a conocer se observa que los agentes de control son abucheados mientras se retiran del estacionamiento.

En tanto, también se especifica un aparente segundo hecho de violencia acaecido el jueves en torno a las 8 en la oficina de Control de Personal en el Palacio Municipal. En el marco del ruidazo que se viene realizando periódicamente en el hall central, en esta ocasión un grupo se habría dirigido hasta dicha oficina “amedrentando al jefe del área y a los agentes que se encontraban allí para que no realicen más controles cuando se toman medidas de fuerza”. En el texto no se puntualiza en qué consistió el amedrentamiento.

Finalmente, los firmantes de la nota destacaron que producto de estos hechos tomaron la decisión de no realizar más controles internos mientras haya medidas de fuerza,debido a las “situaciones de hostilidad y por miedo a que los integrantes del sindicato tomen represalias”.