Marcha contra el gatillo fácil: "Atacan a los más jóvenes como en la dictadura"

Al cumplirse tan solo diez días de la muerte de Emanuel Márquez, el joven de 23 años que murió de un balazo en la frente presuntamente por un efectivo policial en el predio de disposición final de residuos, este lunes se llevó a cabo en Mar del Plata la tradicional marcha contra el gatillo fácil.

Con consignas en alusión a la muerte que involucró a cuatro efectivos de la Policía de la provincia de Buenos Aires, una nutrida columna de manifestantes marchó por el centro de Mar del Plata para cuestionar las políticas "represivas" tanto del Gobierno nacional, provincial y municipal en el marco de la marcha nacional contra el gatillo fácil que se replicó en distintas ciudades del país. En la jornada también hubo cuestionamientos a la baja en la edad de imputabilidad que impulsa la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich.

La convocatoria, organizada por la Coordinadora contra la Represión Policial e Institucional (Correpi), contó con la adhesión de distintas organizaciones políticas y sociales y la participación de familiares de Brandon Romero y Nahuel Olmos, otras víctimas del abuso policial en Mar del Plata de los últimos años.

"Estamos en un contexto de represión de un gobierno negacionista que eleva el nivel de represión de la policía, de todas las fuerzas represivas", señaló Marcelo Roldán del Centro de Profesionales por los Derechos Humanos (CeProDH).

En diálogo con 0223, el activista también cruzó a la Policía Bonaerense por la muerte de Emanuel Márquez, el reciclador de 23 años que murió el viernes 16 de agosto de un disparo en la cabeza en medio de una gresca que involucró a decenas de recuperadores urbanos y cuatro efectivos policiales en el basural de Mar del Plata.

"El Gobierno provincial ejecuta a los pibes en los barrios de la ciudad. El Estado los pone en ese lugar y tiene la misma herramienta, la Policía, para directamente eliminarlos", cuestionó.

En ese sentido, cuestionó al intendente Guillermo Montenegro, quien en reiteradas ocasiones tomó partida por los efectivos de seguridad. "Es una vergüenza. Sin saber nada, él ya está dando por hecho que el culpable es el trabajador. Pero bueno, no nos extraña de alguien que es negacionista y propone poner una destilería en el Faro de la Memoria", apuntó.

El miembro del CeProDH también cuestionó el rol de la Justicia y aseguró que hay una persecución contra los grupos más jóvenes de la sociedad como en los tiempos de la última dictadura cívico militar. "Se ataca a la juventud. El promedio de edad va de 15 a 30 años. Es terrible que el Estado no haya cambiado sus prácticas", concluyó.