"Tengo a mi hijito en un cajón": el desgarrador velorio de Matías Paredes, entre bombos, llanto y pedidos de justicia

Familiares y amigos dan el último adiós a Matías Paredes, el joven de 26 años asesinado por policías este jueves en Polonia y Fortunato de la Plaza, que hoy es velado en una casa funeraria de la zona.

Redoblantes y trompetas con canciones del Club Alvarado sonaron fuerte en Polonia al 1100, donde se despidió a uno de sus fanáticos. Bombo en mano, la madre de la víctima se sumó a la "caravana" entre llantos y gritos al cielo.

"Quiero que no me dejen sola. Se equivocaron de chico y hoy tengo a mi hijito en un cajón. No voy a parar hasta encontrar justicia", clamó María Elena, la mamá, que se encargó de contar cada detalle de la vida de Matías.

Su padre, Horacio, dijo que quiere que "todo se esclarezca": "Se equivocaron mal. Voy a seguir adelante por mi hijo", aseguró y volvió tras los pasos de esa fatídica jornada: "Los chicos no estaban haciendo una maldad. Ellos fueron a una fiesta de Alvarado y volvían para ponerse a jugar a las cartas pero no llegaron nunca".

Al ritmo de los temas de cancha, la mamá agradeció la masiva presencia: "Miren a su gente. Él no era malo. Trabajaba, se iba a las seis de la mañana y tenía una hija que no va a ver más".

A la historia familiar se sumó la novia, desolada. "¿Cómo le explico a mi bebé que su papá ya no está? Quiero que paguen por todo lo que le hicieron, porque él no se metía con nadie, sólo tenía locura por su club y su hija", reconoció.

Abrazos y llanto; todo eso que pasa en un velorio no faltó. Aunque este fue distinto. No sólo por el acompañamiento de la hinchada sino por el reiterado pedido de justicia que protagonizó el encuentro.

"¡Toquen los bombos, quiero justicia!", pidió María Elena a los amigos de Paredes. 

"Que los culpables paguen y no salgan nunca más de la cárcel. Yo me quedo con la alegría que me dio mi hijo, con su hinchada, con los amigos que traía a casa, con sus caritas, con su alegría. Le prometí que voy a buscar justicia y así lo voy a hacer", cerró la mamá.