Tremendo: volvieron del boliche, se pelearon por celos y lo apuñaló en la cabeza
El ataque ocurrió en su casa, donde dormían sus hijas. La Policía encontró a la víctima sobre un charco de sangre.
Por Redacción 0223
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Una salvaje pelea de una pareja terminó de la peor manera a la salida del boliche: un joven lucha por su vida en una sala del Hospital Regional tras haber sido atacado por su novia y recibir cortes de cuchillo en el cuello y la cabeza, mientras dos nenas dormían a unos cuatro metros. El horror tuvo como epicentro una casa ubicada en la calle Ojo de Agua Nº 440, en el Bº Juan Felipe Ibarra de Santiago del Estero, donde los involucrados alquilaban desde hacía tres meses.
La fiscal Andrea Juárez ensayó una reconstrucción de los hechos e indicó que los protagonistas del escándalo asistieron a un establecimiento bailable durante la madrugada, aunque regresaron después de las 6 de la mañana. Repentinamente, estalló una discusión por supuestos celos y los vecinos afirmaron haber escuchado fuertes gritos. Antes de las 9, los oficiales y la integrante del Ministerio Público arribaron al lugar alertados por la propia gente.
Los efectivos encontraron a la mujer tirada en la calle, en ropa interior, bajo estado de shock y literalmente bañada en sangre. A su vez, en la puerta de ingreso yacía, inconsciente, el individuo, en un gran charco de su propia sangre. En el fondo de la casa, además, había ropa del muchacho diseminada en el piso. Mientras tanto, dentro de la vivienda se había desatado el desorden.
La primera impresión de los miembros de las fuerzas de seguridad fue que ambos habían mantenido una pelea. Sin embargo, con el correr de las horas, los funcionarios conjeturaron que ella tomó un cuchillo de carnicero e hirió al joven en el cuello y la cabeza. Las ambulancias arribaron pronto y el sujeto fue trasladado de inmediato a un centro de salud, donde los profesionales lo intervinieron quirúrgicamente. Por lo pronto, permanece en la sala de terapia intensiva.
A su vez, la presunta victimaria quedó aprehendida por homicidio en grado de tentativa, agravado por el vínculo. Si bien las dos pequeñas asomaban como las únicas testigos, lo cierto es que se encontraban durmiendo en una sola cama cuando los policías se hicieron presentes. La fiscal secuestró los celulares, ropa con sangre y el elemento con el que la joven, identificada como Sabrina del Valle Rocha, prácticamente degolló a Lautaro Leiva, de 21 años.
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