Envenenaron a 10 perros en San Jacinto y buscan al responsable: "Tenemos miedo que el próximo sea un chico"

El terror y la impotencia se apoderaron de vecinos del barrio San Jacinto luego de que al menos 10 perros con dueño aparecieran muertos.

Se trata de mascotas que se encontraban dentro de sus viviendas y estaban identificadas con collares o chapitas, por lo que se descarta un intento de controlar las jaurías callejeras.

El primer hecho se dio hace pocos días con un perrito que comenzó a padecer malestar, vómitos blancos y convulsiones. Pocos minutos después de ese episodio, falleció ante la mirada de los vecinos que trataron de auxiliarlo.

"Cuando nos enteramos del caso empezamos a caminar el barrio y ver si eso estaba ocurriendo en otros puntos, porque fue muy extraña la forma en la que el animal murió", explicó a 0223 Jorge Navarro, presidente de la Sociedad de Fomento.

Efectivamente, las sospechas se volvieron realidad y el rastrillaje arrojó como resultado otros perros cuyos decesos eran idénticos. "Son casos salteados, cinco perros en una casa, tres en otra, algunos grandes pero otros cachorros", identificó el fomentista.

Lo curioso es que los perros no estaban sueltos ni atacaban gente, sino que la mayoría permanecía dentro del perímetro de su vivienda y bajo cuidados. 

"Son animales que no van a salir a agredirte, sino que están en constante vigilia, muy atentos a lo que pasa durante la noche. Y matan no sólo a un integrante más de la familia sino a alguien que te cuida", señaló Navarro. 

El barrio, más allá de algún hecho delictivo, suele ser tranquilo según indican sus habitantes. Pero este hecho los entristece y moviliza. Sin embargo, no es la primera vez que sucede algo así.

"Tenemos un antecedente de más o menos 10 años atrás, cuando hubo una matanza de 14 perros que aparecieron envenenados. Lo peor es que como consecuencia a los pocos días comenzaron los hechos delictivos, por lo que no descartamos que lo hayan hecho para robar sin problemas", contó el vecinalista.

Tanto en ese momento como ahora, no encontraron a ningún responsable. Al reunir los casos, realizaron una denuncia a la Comisaría 13 y desde la Fiscalía abrieron una investigación. A su vez, se comunicaron con Zoonosis del Municipio para solicitar autopsias que comprueben el envenenamiento pero les confirmaron que no disponen de elementos para hacerlo, por lo que están esperando una respuesta del Colegio de Veterinarios de la Provincia.

"Estamos bastante preocupados y muy atentos. Pedimos a los vecinos que tengan a los perros al resguardo y que tengan mucho cuidado con los niños porque no queremos que el próximo sea un chico. En los últimos días han desaparecido otros animales y los estamos buscando, por lo que puede haber más casos", adelantó.