Se fue Roberto De Vicenzo, y dejó parte de su historia en Mar del Plata

Quien fue uno de los mejores golfistas de la historia y fallecido este jueves, fue asiduo concurrente de la ciudad, donde ganó uno de  sus nueve Abiertos de la República en 1974.

2 de Junio de 2017 13:10

Por Redacción 0223

PARA 0223

Por Carlos Gonzalo, especial para 0223*

Considerado como el mejor jugador de golf de habla no inglesa (según Jim Murray de Golf Magazine), el maestro Don Roberto De Vicenzo nos dejó a los 94 años en su casa del Club Ranelagh, a la vera de la cancha que lo tuvo como vecino. Fue uno de los cinco deportistas más grandes de todos los tiempos del país, ganador de dos Olimpia de Oro. Sus 231 victorias, 127 segundos lugares y 82 terceras posiciones, lo convierten en un genio del golf, en algo inalcanzable. Y mantuvo una relación fluida con Mar del Plata, siendo campeón en diversos certamenes.

Fue campeón en el Abierto de 16 países. En 1974 ganó la friolera suma de once torneos, récord no alcanzado en la historia de golf. Ganó la Copa del Mundo en 1953, junto a Cerdá. Como el Abierto Británico de 1967. Y se le escapó un año después el Masters en Augusta, por un error que inconscientemente provoca al anotarse un golpe de más, perdiéndose de ir al desempate frente a Bob Goalby.

Ganó 9 veces el Abierto de la República, una de ellas en el Club Mar del Plata Los Acantilados, en 1974. Además, el Sierra de los Padres Golf Club, lo tiene como profesional en los comienzos de los años ´50. Posee el récord de 8 victorias en el Abierto del Sur, torneo que cumplirá 100 años en el 2018, y donde su lucha con Enrique Bertolino fue mas que evidente, ya que éste lo ganó 7 veces. Claro, este ultimo solia venir a practicar la cancha 20 dias antes, situación que don Roberto De Vicenzo no podia hacer pòr motivos laborales y que siempre recordaba. No le molestaba recordar su paso de caddie y lagunero allá en Migueletes.

En Mar del Plata fue amigo y admirado de Aurelio "el Moro" Castañón (1906-2003), precursor de este deporte en el país y que un año después de nacer en España, se radicó en Mar del Plata. "Un señor del golf y de la vida. Jugaba bien", contó De Vicenzo a este periodista años atrás.

Don Roberto logró ser uno más de aquellos jugadores que se destacan de manera brillante en la práctica de ciertos deportes, proviniendo de las capas bajas de la sociedad, logrando el reconocimiento que ahora le brindamos. Y como un fina ironía del destino, pudo decir que con el carnet de pobre, te esperan los mas grande éxitos, no solo en la vida deportiva como en este caso, si no en cualquier otro orden.

Don Roberto De Vicenzo preparó sus palos, no jugará mas entre nosotros y cómo será la cosa, si hasta dios la tendrá difícil en un Match Play. 

*Periodista radial especializado en golf, columnista en revista Tiempo Récord.

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