Policía desafectado operaba con dos bandas distintas durante su horario de trabajo

Horas después de los ocho allanamientos simultáneos que permitieron desbaratar dos bandas que cometían entranderas en la ciudad, detener a tres personas, aprehender a otras seis y secuestrar armas, dinero y otros elementos de interés se conocieron detalles de los hechos que derivaron en la formación de una única causa. El único punto en común entre ambos grupos era el oficial del Comando que monitoreaba la frecuencia policial durante su horario de trabajo y a bordo del patrullero alertaba a los delincuentes sobre la presencia de otros móviles en la zona de los robos.

El fiscal Mariano Moyano junto a los jefes de la Jefatura Departamental y de la Delegación Departamental de Investigaciones dio detalles de la causa que comenzó a fines de junio pasado tras el robo a un matrimonio de adultos mayores en su casa de Balcarce al 5200. Si bien los allanamientos se dieron en orden a cuatro hechos confirmados, se estima que ambas bandas habrían realizado más robos con el apoyo del desafectado oficial. “En uno de los allanamientos se halló documentación a nombre de la mujer que fue asaltada el martes pasado por lo que también se investiga la autoría de ese hecho”, dijo el fiscal.

Víctor Manuel Correa –de 32 años- había ingresado hacer cuatro años a la fuerza, desarrollaba su tarea en el Comando de Patrullas Norte y está imputado en dos de los hechos. Este jueves también fueron detenidos Sergio Fabián Uñate (46) y Kevin Abel Arripe (29), ambos imputados de robo agravado en viviendas, mientras que Sergio David Nieva (32) quedó en condición de prófugo.

En los allanamientos que se efectivizaron en los domicilios ubicados en Almafuerte al 5100, Los Talas y Anchorena, Los Talas 2952, Las Higueras al 3100, Calchaquí al 6500, Cianchetta al 3000, Caraza al 9400 y calle 81 al 4700 fueron aprehendidos tres hombres y una mujer en orden al delito de tenencia ilegal compartida de armas de fuego y encubrimiento.

Además de las detenciones se secuestraron tres automóviles, cuatro armas de fuego –incluyendo la reglamentaria de Correa- dos chalecos antibalas, un revólver a gas, alrededor de  40 mil pesos, 400 dólares, veinte celulares, un equipo de comunicación, relojes y prendas de vestir.

Los imputados quedaron alojados en la alcaidía penitenciaria de Batán y en el Destacamento Femenino y este viernes serán trasladados a tribunales para prestar declaración.

Impunidad garantizada en los robos

En orden cronológico el primero de los hechos atribuídos a las bandas se dio el 29 de junio pasado cuando al menos tres sujetos ingresaron por el balcón a una vivienda en la ubicada en la calla Balcarce entre Marconi y Uruguay. Allí redujeron a un hombre de 89 años y a su esposa de 84 a quienes les robaron dinero, alhajas y elementos de valor.

Casi un mes más tarde el gabinete especializado de la DDI trabajó en un hecho con características similares que permitió hallar puntos en común. En esa oportunidad  una mujer de 88 años denunció que tres sujetos ingresaron a su finca en Pasteur al 1300 tras efectuar boquete en techoy la redujeron. Tras rociarla con alcohol y amenazar con quemarla, sustrajeron dinero, alhajas y elementos de valor.

El tercero de los hechos que integró la investigación que derivó en los ocho allanamientos se dio el 12 de octubre pasado cuando dos sujetos redujeron a golpes a un hombre de 80 años en su casa de Gascón al 4400 para robarle el dinero que tenían en su poder. Según el fiscal Moyano tras ese robo el oficial del Comando coordinó un encuentro con los ladrones pocos minutos después para obtener “su parte”.

Dos días más tarde una de las bandas redujo a un cuidador de 32 años que se acercó a la casa ubicada en López y Planes al 1600 luego de que el propietario lo llamara porque se había activado la alarma. Tras amenazar al empleado de la empresa de monitoreo le robaron las llaves de la finca, el Handy y lo encerraron en el baño.