El nuevo desafío de la Técnica 5: crear prótesis con sensores musculares

A principios de 2018 la Escuela Técnica N°5 recibió dos impresoras 3D que impulsaron un nuevo proyecto en la escuela. A partir de un convenio con una ONG y el vínculo con el Hospital Materno Infantil, los estudiantes de séptimo año comenzaron a realizar férulas, bio-réplicas y prótesis para los chicos que se atienden allí.

“Cuando el Gobierno de la Provincia de Buenos Aires entregó las dos impresoras comenzamos a ver qué podíamos hacer”, sostuvo el profesor Diego Álvarez, encargado del Laboratorio de Informática. “Lo que teníamos en claro es que queríamos darle algún fin solidario”. Actualmente, a esas dos impresoras originales se sumaron tres más que armaron los propios docentes y estudiantes.

Con el objetivo de aprender, practicar y colaborar, el año pasado un grupo de estudiantes del último año realizaron distintos objetos como por ejemplo “férulas plásticas que permiten reemplazar al yeso”. Así, quienes deben utilizarlas pueden bañarse o meterse al agua sin las dificultades que conllevan los yesos tradicionales. En enero realizaron una férula para una chica que se había cortado los tendones de la muñeca, “esta nena se iba a pasar todo el verano con yeso y se fue con una férula de plástico”, comentó Álvarez.

Además se realizaron material didáctico para no videntes, “un dispositivo especial para una nena que no podía asimilar el bastón, adaptadores para lápices y cubiertos destinados a personas con problema de prensión: “hicimos hasta unos adaptadores para una señora con amputación de dedos que le permiten pinchar y cortar la comida”.

A partir de esta iniciativa de los docentes Ricardo Lorenzani, Diego Álvarez, Paola Flament y Ariel Calvo, el Ministerio de Educación, Cultura, Ciencia y Tecnología de la Nación les entregó la distinción del certamen Docentes Innovadores.

Para este año los desafíos se han incrementado, por un lado avanzarán en el diseño de prótesis con sensores musculares “que detectan los movimientos y los traducen a los dedos de las prótesis”. Otro de los proyectos es realizar marcos para los lentes ya que suelen ser muy costosos y muchas familias que se atienden en el Materno Infantil no los pueden comprar. Para ello “hicimos contacto con una óptica que se suma a la causa solidaria y ofrece donar los vidrios y armar los lentes”.

Los estudiantes que han participado en el proyecto en 2018 demostraron un gran compromiso, de hecho algunos de ellos concurrieron a la escuela en enero para realizar la férula para la chica que se había cortado los tendones de la muñeca.  En este sentido Álvarez destacó que los alumnos “tienen asignadas 200 horas de práctica y hay quienes que duplicaron esa cantidad”. Hubo chicos que cumplieron su cuota antes de llegar a mitad de año y siguieron participando todo el segundo cuatrimestre.

Cabe destacar que la mayoría de los materiales que utilizan son comprados por la cooperadora de la escuela aunque también se han recibido donaciones. Además, cada vez que el colegio o los docentes ganan un premio, ese dinero se utiliza para comprar insumos. “Hace pocos meses le hicimos 30 simuladores de RCP a la Cruz Roja que nos dio los materiales para esa producción”, de esta manera la institución colabora con la sociedad y los alumnos pueden realizar las prácticas en el Laboratorio.