Quisieron robar una escuela y los vecinos los corrieron a botellazos

La situación de inseguridad que padecen algunos barrios de Mar del Plata se cobró este fin de semana un nuevo hecho delictivo con el ataque a una escuela del barrio San Martín y que tuvo su singularidad, cuando los vecinos, decidieron correr a los ladrones a piedrazos y botellazos. 

En diálogo con 0223, Rosana Moreno y Virginia Sáez, directoras de la Secundaria 47 y la Primaria 35, respectivamente, que comparten el edificio de Benito Lynch y Del Riego, contaron que este robo, ocurrido el viernes a la tarde, es el cuarto en un mes.

"Cuando volvía de una actividad, me llama una vecina diciendo que dos ladrones estaban adentro destrozando la escuela. Como vivo en el Bosque, me volví y veo que estos escapaban, trepando los muros, con un inodoro en la mano. Cuando entramos, vimos los destrozos en los baños, en la preceptoría, muchos vidrios rotos. Una situación horrible porque uno tiene al lugar impecable. Lo habíamos pintado en marzo", lamentó Moreno.

Para las docentes, la ausencia de un sistema de alarma alrededor de los muros, permite que los malvivientes ingresen al patio y desde allí al resto del establecimiento.

"Acá nos salvaron los vecinos, que cuidan al colegio. Pero fue una batalla campal con piedras y botellas en que lograron persuadirlos. Pero no es lo que debería suceder. El tema es prevenirlo. Sabemos que lamentablemente los que hacen esto, son de la zona", añadió.

Este nuevo hecho vandálico se da sobre una establecimiento que esta totalmente "barreteado" en sus puertas y ventanas y que según las directivas escolares, "necesita de mayor seguridad policial", situación que excede la continuidad de los reclamos, incluso del Consejo Escolar, "porque hace 5 años venimos pidiendo una garita de Prefectura en la esquina y aún no logramos nada". 

"Cuando la crisis social se ve acrecentada, la escuela recibe ese impacto bien en la cara. Nosotros estábamos felices porque hacíamos una acción solidaria, con la entrega de bolsones de comida y veíamos al barrio venir, pero en realidad muchos de ellos venían solo para ver que hay para después entrar a robar", lamentó una de las docentes.