Alberto Fernández: "Comencemos por los últimos, para poder llegar a todos"

Planteó como ejes la renegociación de la deuda, la reforma en la justicia federal y en la AFI, el control de precios y un plan de Conectividad Digital en escuelas. En 10 días presentará un proyecto de ley por el aborto legal.

1 de Marzo de 2020 13:30

Por Redacción 0223

PARA 0223

El presidente de la Nación Alberto Fernández dio este domingo 1 de marzo la apertura del 138° período de sesiones ordinarias del Congreso. En su primer discurso ante la Asamblea Legislativa, el jefe de estado cuestionó al gobierno de Mauricio Macri por el endeudamiento “récord” de la Argentina y la fuga de dólares y remarcó que la deuda externa no se va a pagar “a costa del hambre y la destrucción de sueños de los argentinos y las argentinas”.

En ese punto, el Presidente sostuvo que se buscará saber “quienes permitieron” ese endeudamiento y pidió “no hacernos los distraídos”, por el “daño inmenso” que deberán soportar varias generaciones de argentinos. 

“Nunca más a un endeudamiento insostenible, nunca más a decisiones que se toman con ínfulas tecnocráticas de la noche a la mañana, a espaldas del pueblo, nunca más a la puerta giratoria de dólares que ingresan por el endeudamiento y se fugan dejando tierra arrasada a su paso”, remarcó ante el aplauso de la mayor parte del Congreso.

Uno de los temas centrales tratados por Alberto Fernández fue la legalización del aborto, en el que adelantó que en los próximos 10 días presentará un proyecto de ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo, “que legalice el aborto en el tiempo inicial del embarazo y permita a las mujeres acceder al sistema de salud cuando toman la decisión de abortar”.

En tal sentido, agregó que el Ejecutivo lanzará un “contundente programa de educación sexual integral y prevención del embarazo no deseado”, además de sumar un proyecto de ley “que instaure el Plan de los 1000 días, para garantizar la atención y el cuidado integral de la vida y de la salud de la mujer embarazada y de sus hijos o hijas en los primeros años de vida”.

Luego de cuestionar la política en Derechos Humanos de la gestión de Cambiemos, “que dejó sin responder al menos 120 casos ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH)” y de la falta del envío de fondos al Equipo Argentino de Antropología Forense, el primer mandatario sostuvo que “la defensa de los derechos humanos no es la columna vertebral de un Gobierno, sino la columna vertebral de la República Argentina en su conjunto. Sin memoria, verdad y justicia la Argentina no se puede poner realmente de pie", exclamó.

Además de impulsar el reforzamiento de la implementación y cumplimiento efectivo de la Ley Micaela, se refirió al impulso de un Plan Nacional de Acción contra las Violencias por razones de Género 2020-202, el relanzamiento de la Línea Nacional 144 y el envió al Congreso de un proyecto de Ley para la ratificación de un convenio sobre Violencia y Acoso en el mundo laboral.

En materia de Educación,  Fernández planteó el cumplimiento de la Ley de Financiamiento, la Ley de Educación nacional o la de Educación Técnica, que hace 4 años “son incumplidas”, el fortalecimiento del sistema universitario y subrayó que su gobierno impulsará a “que cada adolescente tenga sus libros y tenga una computadora”.

Asimismo, el jefe de estado señaló que la intervención de la Agencia Federal de Inteligencia, fue para terminar “con oscurantismo que imperó en estos años” y adelantó que esta semana “dictaré un Decreto de Necesidad y Urgencia que modifique la Ley de Inteligencia impidiendo a los organismos de inteligencia realizar tareas represivas, poseer facultades compulsivas, cumplir funciones policiales o desarrollar tareas de investigación criminal como auxiliares de la Justicia”.

En relación a la reforma de la justicia federal, Fernández pidió "poner fin a la designación de jueces amigos" y para tal fin propuso la creación de un nuevo Fuero Federal Penal, "que impida la construcción de falsas causas, que acabe con la arbitrariedad en materia de detenciones". 

Durante su alocución al Congreso, el Presidente puso especial atención en la lucha contra el hambre y mencionó a la tarjeta Alimentar, que tendrá la inyección de más de 70 mil millones de pesos anuales, además de remarcar la fuerte posición del gobierno en el control de precios y a los denominados formadores de precios.

“Argentina no resiste más el abuso de quienes preservan su rentabilidad a costa de consumidores condenados a pagar sus excesos preventivos. Debemos terminar con la Argentina de los “vivos” que se enriquecen a costa de los pobres “bobos” que estamos condenados a pagar lo que consumimos”, señaló y agregó: “Los pícaros que especulan subiendo los precios no tiene cabida en esta Argentina”.  

Temas