Chadim se defendió de las acusaciones y le apuntó a la familia del residente

Desde le institución aseguran que le explicaron que las personas que se retiraran antes del 14 de marzo no iban a poder regresar. Además plantearon un "largo historial de violencia" de familiares y allegados de Javier Martínez. 

La institución hizo un planteo a la Justicia de Familia.

24 de Junio de 2020 09:37

Por Redacción 0223

PARA 0223

Las autoridades de Chadim salieron al cruce de la denuncia en su contra que realizó una familia por dejar en la calle a un joven con un trastorno mental en medio de la pandemia y remarcaron que la familia Javier Martínez arrastra un "largo historial de violencia" que pone en riesgo tanto a los trabajadores de la institución como a las personas que residen allí.

Desde la institución explicaron que debido a la situación excepcional provcada por la pandemia y en línea con la disposición del Comité de Salud Municipal les informaron a los residentes que todas aquellas personas que se hubieren retirado de la institución antes del 14 de marzo no iban a poder reingresar. Ese fue el motivo, explicaron, por el cual Martínez no fue readmitido, pero aclararon que no fue una medida particular en perjuicio de él sino que también involucró a otros tres residentes.

“Como consecuencia de ello, el domingo 15 de marzo, ocurrieron dos hechos violentos”, detalló la abogada de la institución en una presentación que realizó ante el Juzgado de Familia 6.

Detalló que alrededor de las 16.30 Martínez llegó al lugar acompañado de su tía. “Pese a haber sido informada de que si lo retiraba del lugar no podría re ingresarlo, se presentó y haciendo oídos sordos a la prohibición de reingreso del residente, comenzó a proferir insultos y amenazas contra los directivos y el personal presente. Y lo que es peor, sus agresiones, alteraron a los demás residentes, quienes estaban atemorizados por los gritos, insultos y golpes propinados a las ventanas. Se le reiteraron los argumentos, que no justificaban su proceder y se retiró”, detalló la letrada.

Luego, según la presentación judicial, a las 18.30 la mujer regresó acompañada de su hermana, “Ambas desarrollaron un nivel de agresión verbal tal, que temiendo por la integridad psicofísica del personal de la institución, ante las amenazas propinadas por ambas, los directivos se vieron en la obligación de llamar al  911. Concurrió la policía al establecimiento y debió intervenir para calmar a estas dos personas”, relató.

Ese episodio, explicó, también incluyó violencia sobre una terapista ocupacional que realizó la denuncia en la comisaría 16ª por la rotura del parabrisas de su auto.

Con esos argumentos, desde la institución le solicitaron a la jueza Adriana Rotonda que deje sin efecto una medida cautelar dispuesta el 16 de marzo porque supondría un “gravamen irreparable” porque las personas que se encuentran en Chadim actualmente “poseen patologías de base lo que los hace vulnerables al contagio del Covid-19”. Y agregó: “Permitir el reingreso de Martínez significaría poner en riesgo cierto e inminente a sus compañeros”.

Además, desde la institución le pidieron a la justicia que impida el acercamiento de la familia y el entorno de Martínez. “Con sus comportamientos, gritos, golpes e insultos alteran a nuestros internados y causan un  perjuicio al personal, como así también Martínez, quien es agresivo con el resto de sus compañeros quienes le temen y su sola presencia los altera muchísimo”, sostuvieron.