Fin de la espera: Milagros volvió de Santa Fe y ya está con su familia en Mar del Plata

Milagros Belén Cáceres, la adolescente que fue localizada este lunes en Santa Fe después de permanecer desaparecida desde el lunes 8 de febrero, ya está en Mar del Plata con su familia después de transitar varios días de preocupación y tensión por su búsqueda.

Luisa, la abuela de la menor de 14 años, confirmó que la llegada a la ciudad se materializó en horas de la madrugada, con la presencia de personal policial y otros profesionales de la salud.

"Vino alrededor de la 1.30 y estuvo acompañada por un gabiente de trata de personas, psciológos y otros asisentes. Gracias a Dios está bien de salud y no tiene lesiones ni nada, tal como nos habían dicho. Fue un susto pero terminó bien", expresó la mujer, ante la consulta que le hizo 0223.

La familia de Milagros confirmó que prestó declaración ante las autoridades policiales locales y que la Justicia determinó como "medida de abrigo" que la tenencia quede a cargo de su abuela por el término de seis meses.

Se prevé que en los próximos días también arribe a la ciudad el hombre que estaba con Milagros, quien permanece detenido por estas horas en Santa Fe. La mujer dijo que la adolescente también deberá declarar en Cámara Gesell. "Ahora se van a seguir dando distintos pasos en la Justicia", comentó.

En principio, Luisa, en base al testimonio que brindó la menor, descartó que la desaparición se haya enmmarcado dentro de un caso de trata de personas, tal como había trascendido poco después de localizar su paradero.

Según lo que pudo reconstruir, la persona que se llevó a Milagros le dijo que se iba a Bolivia y la adolescente decidió acompañarlo por diferentes motivos personales. "No importa si ella quería irse o lo que él diga; esta persona es bastante mayor y sabe lo que está haciendo. Tiene que pensar antes de llevarse a una menor sin hablar con la familia ni nada. Nunca se puede hacer algo así. Es casi como un secuestro", cuestionó la abuela.

"Por lo menos ahora la podemos abrazar y contenerla. Lo que más que hay que hacer ahora es hablar con ella para comprenderla. Hablando siempre se puede entender a las criaturas", reflexionó Luisa.