La ola polar disparó el consumo de energía eléctrica: Mar del Plata batió su récord

El pasado viernes, en la ciudad se registró una demanda de 297 megawats. Un hecho inédito para la ciudad. Desde Edea garantizan el servicio para el invierno.

No se descarta que la demanda de energía eléctrica siga creciendo.

15 de Junio de 2022 11:09

Por Redacción 0223

PARA 0223

Las bajas temperaturas de Mar del Plata durante los primeros días de junio provocaron una demanda récord de energía eléctrica. Según informaron desde la Empresa Distribuidora de Energía Eléctrica del Atlántico (Edea), en la ciudad se registró una demanda de 297 megawats, en un hecho inédito para la ciudad.

Según pudo saber 0223, el pico máximo de consumo de energía se había registrado en enero de 2017 con 292 megawats. Además, desde Edea indicaron que no descartan que el actual récord sea superado con el transcurrir del invierno dado el notable incremento que está ocurriendo en barrios de la periferia donde el aumento del consumo eléctrico está relacionado generalmente con el uso de estufas y caloventores eléctricos.

Además, Edea indicó que el aumento más notorio se da hacia el oeste en los barrios General Belgrano, Las Heras, Autódromo, La Herradura y Don Emilio, en el sur en Acantilados y Playa Chapadmalal y al norte de la ciudad en Parque Camet, Felix U. Camet y Las Dalias.

La distribuidora indicó que el sistema ha respondido de manera eficiente no registrándose mayores inconvenientes salvo cuestiones puntuales que hacen al funcionamiento del servicio eléctrico.

Desde Edea señalaron que hubo una alta demanda de energía en los barrios.

 

En este marco la compañía está realizando una serie de mejoras en aquellos barrios donde se requiere mayor potencia para dar respuesta al aumento del consumo, tal el caso de Félix U. Camet donde se reemplazó un transformador de 100 KVA por otro de 200, al tiempo que se repararon líneas y se reemplazaron aisladores y ajustaron conexiones.

Por último, se dio continuidad a los trabajos para mejorar el servicio en Sierra de los Padres donde se llevó a cabo trabajos de poda y reemplazo de líneas convencionales por otras de tipo compacto más resistentes al contacto con los árboles.